Detenida una pareja por difundir un vídeo íntimo de la exnovia de él
Un hombre de 40 años y su actual pareja de 34 fueron detenidos ayer en Albacete por la Policía acusados de haber difundido un vídeo con imágenes “de carácter íntimo y de índole sexual” donde aparecía la expareja de él. El vídeo en cuestión circulaba por Whatsapp.
A los arrestados se les acusa de un delito contra la intimidad y de otro por revelación de secretos entre particulares.
La víctima denunció los hechos en el mes de agosto, después de ser “alertada por varias personas conocidas” de que un vídeo donde aparecía ella estaba siendo movido por la aplicación de mensajería.
El vídeo contenía imágenes de la denunciante, que se autofilmó, mientras manipulaba un juguete erótico. Después le envió el vídeo a su entonces novio, que se lo había pedido.
Transcurrido un tiempo, y después de que la relación se acabara, comenzó a circular el vídeo entre usuarios de WhatsApp, cuando, según la denun- ciante, el archivo lo envió exclusivamente al detenido para uso sólo personal y luego lo borró.
Tras la detención del hombre, los agentes de la Policía Nacional registraron sus dos domicilios, en Albacete capital, y en uno de ellos se encontró un ordenador portátil “donde se recuperó el archivo de vídeo”.
Los agentes descubrieron que “la actual pareja del arrestado había participado en los hechos”, accediendo al móvil del detenido y enviando “el vídeo a algunos contactos de la agenda”. La detenida ha explicado que conocía la clave de acceso al
móvil de su novio porque lo observaba teclear y era fácil de recordar.
Este caso vuelve a abrir el debate de las violaciones al derecho de la intimidad, sobre todo en las redes sociales. La ley establece que “el derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen es irrenunciable, inalienable e imprescriptible”. Aunque el vídeo lo enviara la víctima, una vez acabada la relación sentimental, el detenido no tiene derecho a difundir las imágenes, y menos sin el consentimiento de la que entonces era su pareja.