El dolor de las estrellas
El mundo del deporte se suma a la ola de solidaridad por los atentados de París
Sergi Roberto recorría las calles de París y un gendarme le recomendó que regresara a su apartamento. Álvaro Arbeloa no sabía cómo explicar a su hijo por qué lloraba toda la ciudad y por qué estaba cerrado Disneyland. Antoine Griezmann transmitía su infinito alivio porque su hermana, presente en la sala Bataclan, donde más personas fueron asesinadas en los atentados de la capital francesa, hubiera podido salir con vida del local. Mientras, el colegiado Mateu Lahoz sólo tenía ganas de llegar a casa para “abrazar a los suyos” tras permanecer confinado durante unas horas en el Stade de France, ya que dirigió el Francia-Alemania que se disputó cerca de una de los puntos elegidos por los terroristas para desatar el horror. El mundo del deporte reaccionó con consternación a la barbarie y se sumó a la solidaridad mientras se suspendían todas las actividades deportivas del fin de semana en la región de París. A unos les tocó muy de cerca, a otros desde la distancia pero las principales referencias deportivas manifestaron su dolor y su rabia con la misma implicación para solidarizarse con Francia, el país que ha de acoger la Eurocopa 2016.
Luis Enrique había decretado tres días de fiesta y Sergi Roberto había decidido regalarse una escapada en París junto a un par de amigos. Cuando paseaba con ellos tras cenar empezaron a apercibirse de que algo no funcionaba bien por el número de sirenas de ambulancia y de vehículos policiales que atronaban por el lugar. Un policía les aconsejó que volvieran a su lugar de hospedaje y se marcharon corriendo. Ayer contactó con el Barça para comunicar que estaba bien. No era el único jugador de la Liga de asueto en la ciudad. Los sucesos también pillaron allí al madridista Arbeloa, con su familia, con la idea de visitar el mundo Disney. Aunque uno de los deportistas que más vivieron la situación fue el delantero del Atlético Griezmann porque jugó el partido en el que se oyó de forma clara una deflagración y porque su hermana estaba en el concierto de la sala Bataclan. “Gracias a Dios mi hermana fue capaz de salir de Bataclan. Todas mis oraciones están con las víctimas y sus familias. Viva Francia”, escribió el jugador colchonero en Twitter. Menos suerte tuvo el exmadridista Lass Diarra, que también disputó el encuentro y que ayer confirmó que su prima había fallecido en los atentados. Diarra difundió una carta para confirmarlo y lanzar un mensaje de hermandad. “Como representantes de nuestro país y su diversidad tenemos que tomar la palabra y permanecer unidos ante un horror que no tiene color ni religión”.
Si en el vestuario de la selección francesa la preocupación era enorme, toda inquietud era poca para el equipo alemán. La Mannschaft decidió permanecer toda la noche en el estadio. “Queríamos evitar todo riesgo y no queríamos cruzar París (Saint- Denis se encuentra muy alejado del centro). Los jugadores vivieron la situación en estado de shock y con gran ansiedad”, dijo Oliver Bierhoff, director deportivo de Alemania. El equipo, protegido por policías armados hasta los dientes, regresó ayer a su país, aunque los jugadores, que tenían que mantenerse concentrados y entrenarse, fueron enviados a sus domicilios. A su casa quería volver cuanto antes Mateu Lahoz. “Sólo siento pena por las víctimas y sus familiares, y también rabia y nada de ánimo”, explicó el colegiado.
A FLOR DE PIEL La hermana de Griezmann salió con vida de la sala Bataclan, pero la prima de Lass Diarra falleció
EN EL LUGAR DE LOS HECHOS Sergi Roberto vivió los sucesos en París y la selección alemana pasó la noche en el estadio
Desde la distancia algunos de los deportistas que más pendientes estaban de lo que ocurría en Francia eran los diez franceses de la NBA. Como el pívot de los Chicago Bulls Joachim Noah. “Rápidamente telefoneé a mi padre (el extenista Yannick) para comprobar si estaba bien”, explicó el jugador.
Nadie podía permanecer impasible. Así lo entendieron muchos de los cracks. “Reafirmar hoy más que nunca que sólo existe un camino: la paz y la fraternidad entre los seres humanos”, escribió Lionel Messi en Facebook. “No puedo ser indiferente. Mi pensamiento está con las familias y las víctimas”, colgó Cristiano Ronaldo en Twitter. Más emotivo incluso fue el mensaje de Rafa Nadal, que ha protagonizado en el Roland Garros parisino algunas de sus mayores gestas. “Estoy destrozado por todo lo que ha pasado. Mando todo mi cariño y apoyo a toda Francia y a todos los ciudadanos de París”, expuso el tenista. Un amigo suyo como Pau Gasol se añadió a los mensajes de dolor y pésame. “Es una noticia devastadora. Espero que estos ataques se detengan. No es humano. No es justo”, argumentó el pívot de Sant Boi. En la misma línea se manifestaron otros campeones como LeBron James, Fernando Alonso o Jorge Lorenzo.
Los organismos decretaron minutos de silencio y homenajes y se plantearon más medidas de seguridad. Así será en el Bélgica-España del martes o en el Inglaterra-Francia del mismo día en Wembley, que se iba a suspender pero se jugará. El deporte desea volver a la normalidad.