El mal se crió en Europa
Se le hacía en algún lugar Siria, desde donde amenazaba a Occidente con mensajes de muerte y destrucción, pero reapareció en un piso franco al norte de París. La fiscalía de la capital francesa confirmó ayer que Abdelhamid Abaaoud, el enemigo público número uno de Europa en estos momentos como autor intelectual de los atentados de París, es uno de los dos terroristas muertos en el asalto policial realizado la madrugada del miércoles en Saint-Denis.
Nació en el barrio de Molenbeek, Bruselas, en 1987, en el seno de una familia de origen marroquí sin problemas. Su padre llegó a Bélgica para trabajar en las minas; prosperó y abrió una tienda de ropa en el populoso barrio. Vivían sin lujos pero sin apuros. Cuando cumplió 12 años y debía empezar la enseñanza secundaria, sus padres hicieron el esfuerzo de enviarlo a un instituto en Uccle, en el otro extremo de Bruselas, uno de sus barrios más acomodados. Aguantó un curso.
Pronto se dio a conocer por sus fechorías. En el 2006, con 19 años, fue condenado a trabajos sociales por varios trapicheos. Su conducta empeoró. En el 2009 fue juzgado por peleas y rebelión a la autoridad. En un fichero judicial del 2010 sobre un robo, su nombre aparece ligado al de su vecino Salah Abdeslam, el presunto terrorista que huyó tras los atentados de París. En el 2011 fue condenado y acabó en prisión. Fue allí donde Abbaoud se radicalizó, según su hermana. Más robos, más líos con la policía... Hasta que un día se fue a Siria para luchar con el Estado Islámico.
La organización ha explotado a fondo con fines propagandísticos la presencia de europeos en sus filas. Abaaoud, también llamado Abou Omar al Belgiki (el belga), aparece en sus vídeos presumiendo de vivir en auténticos palacios en Alepo y celebrando que por fin corra sangre de infieles mientras conduce una camioneta cargada de cadáveres. También profirió amenazas específicas contra Bélgica. Según el diario La Libre Belgique, logró ascender en el organigrama del EI pero siempre “sin hacer sombra a los iraquíes que lo dirigen”. El pasado julio fue juzgado
Hace dos años se sumó al EI; se dedicaba a captar combatientes, entre ellos su hermano de 13 años
en rebeldía en Bélgica y condenado a 20 años de cárcel por reclutar jóvenes europeos para el EI. Entre ellos está su hermano Younnes, a quien se llevó consigo en un viaje a Bélgica en el 2014. Tenía 13 años. Su familia se presentó como acusación en el juicio. “Sólo podemos rezar porque esté muerto”, decía su padre entonces.
La policía belga considera que era el responsable de la célula terrorista desarticulada en Verviers a finales de enero, poco después del atentado contra Charlie Hebdo; pretendían secuestrar policías y decapitarlos para difundir las imágenes y sembrar el terror. En una entrevista en Dabiq, la revista del EI, se jacta de haber estado allí y haber logrado huir a Siria; asegura que un policía le pidió su tarjeta de identidad, la miró y lo dejó ir... No se sabía qué había de verdad y qué de propaganda en esas afirmaciones, pero sí se conocían sus mortíferas intenciones: un yihadista francés detenido en agosto, Reda Hame, confesó que Abaaoud le había pedido cometer un atentado contra algún blanco fácil capaz de causar muchas víctimas, como un concierto. Nadie supo que estaba en Francia hasta el lunes 16, informa Rafael Poch. La información llegó “por un servicio de información no europeo”, parece que marroquí.