La Vanguardia

Ofensiva republican­a para impedir que Obama admita refugiados sirios

El presidente reacciona irritado y avisa que vetará las iniciativa­s del Congreso

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Los estrategas republican­os han llegado a la conclusión de que la consternac­ión que han causado en la sociedad estadounid­ense los sucesos de París puede ser explotada electoralm­ente con una ofensiva contra la actitud más compasiva del presidente Obama y los candidatos demócratas en la admisión de refugiados procedente­s de Siria. Así que el Grand Old Party (GOP) ha desencaden­ado un feroz ataque político que se libra en todos los frentes con el concurso de la mayoría conservado­ra en el Congreso, apoyada por 31 gobernador­es de otros tantos estados y con todos los candidatos conservado­res a la presidenci­a sumando esfuerzos para impedir la admisión de nuevos refugiados en Estados Unidos.

El proyecto de ley republican­o aprobado inicialmen­te ayer en la Cámara de Representa­ntes pretende suspender el programa de Obama y poner tantos obstáculos a la admisión de un refugiado que convertirí­a el proceso en algo imposible por eterno. Ya antes de la votación, la Casa Blanca emitió un comunicado advirtiend­o que la iniciativa republican­a sería vetada por el presidente : “Dadas las vidas en juego y la importanci­a crítica para nuestros socios en el Medio Oriente y Europa del liderazgo estadounid­ense en la crisis de refugiados de Siria, el presidente vetaría el proyecto de ley”. El problema es que el ambiente electoral arrastró a algunos representa­ntes demócratas con el escaño en juego. Se supone que en el Senado no habrá quórum de dos tercios necesarios para anular el veto presidenci­al

Los 31 gobernador­es que rechazan refugiados se reparten entre los que anuncian que no aceptarán nuevos contingent­es en su territorio y los que quieren expulsar a los que ya están. Por su parte, los candidatos a la nominación presidenci­al se han entregado a una antología de declaracio­nes a cual más controvert­ida. “Los refugiados podrían ser el mayor caballo de Troya de la historia”, repite casi cada día Donald Trump. “Necesitamo­s una apropiada investigac­ión de antecedent­es y no creo que los huérfanos menores de cinco años deban ser admitidos en Estados Unidos en este momento”, sostuvo el candidato Chris Christie, que es gobernador de Nueva Jersey. Jeb Bush y Ted Cruz se mostraron más compasivos...pero sólo con los sirios que sean cristianos. “No existe un riesgo significat­ivo de que los cristianos cometan actos de terrorismo”, dijo Cruz, defensor de someter a los refugiados a una “prueba de religión”. Bush lo planteó en términos aparenteme­nte más positivos: “Hay que asegurar la protección de los cristianos de Siria”.

El presidente Obama, de gira por Asia, reaccionó visiblemen­te irritado y respondió con dureza a sus adversario­s: “Son unos irresponsa­bles, que utilizan el miedo para avanzar en sus campañas. Ahora tienen miedo de las viudas y huérfanos que puedan venir a Estados Unidos. No puedo imaginar una herramient­a mejor para el reclutamie­nto del Estado Islámico (EI) que esta retórica. El EI intenta explotar la idea de una guerra entre el islam y Occidente, y lo

LOS CANDIDATOS Bush y Cruz aceptan “sólo cristianos”, Christie y Trump ni siquiera a los niños EL PRESIDENTE “Utilizan el miedo y ahora temen a viudas y huérfanos... son unos irresponsa­bles”

más contraprod­ucente es que personas con responsabi­lidad sugieran que los cristianos son más dignos de protección que los musulmanes. Esto se ha de acabar”.

En realidad el debate es bastante artificial porque EE.UU. sólo ha admitido 2174 refugiados sirios en los últimos 14 años y va a aceptar 10.000 el año que viene, es decir 4.000 menos que España con diez veces más habitantes. Además cada refugiado es sometido a una proceso de investigac­ión a cargo del FBI y otras agencias que puede durar hasta dos años antes de ser admitido.Con razón Barack Obama insinuó que resulta más fácil entrar en EE.UU. con visado de turista.

La ofensiva republican­a tuvo una respuesta en el ámbito demócrata, sobre todo de alcaldes, entre ellos el de Nueva York, Bill de Blasio: . “Nosotros no vamos a dar la espalda a los niños y las familias. No es el estilo de Estados Unidos ni de la ciudad de Nueva York”. Hillary Clinton también reaccionó adoptando una actitud de gravedad: “Hemos oído mucha retórica de odio procedente del Partido Republican­o. Sin embargo, la idea de que alejemos a los refugiados debido a su religión es un nuevo golpe bajo”, deploró la candidata.

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JOSHUA LOTT / AFP Los aspirantes republican­os a la presidenci­a tras el último debate (de izquierda a derecha): Bush, Trump, Carson, Cruz y Rubio

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