L’Hospitalet recupera la memoria de sus refugios antiaéreos
Las guerras son una larga cicatriz en la memoria de los hombres y en la tierra que los ve nacer y morir. Una herida que perdura, a veces escondida en cajas, en legajos o en los recuerdos de quienes la sufrieron. El Arxiu Municipal de l’Hospitalet acaba de recuperar la información sobre 24 refugios antiaéreos de la contienda civil en la ciudad, buena parte de los cuales eran completamente desconocidos hasta ahora, y que regresan así del olvido.
Los bombardeos durante la Guerra Civil son un presencia perenne en Barcelona, donde su intensidad dejó huella. Pero en l’Hospitalet de Llobregat eran un recuerdo difuso, tal como ya se recoge en el trabajo llevado a cabo en el 2008 por Ariadna Ribas Merino y Josep Ribas Vinyals, Bombardeigs i refugis a l’Hospitalet. Allí se describe que hay poca documentación al respecto y pocas personas que aún viven y puedan aportar su testimonio. El texto relata que el primer ataque aéreo de magnitud ocurrió el 25 de julio de 1937, y que afectó a los barrios de Collblanc y La Torrassa, con un balance de 18 muertos. La ciudad también era un objetivo, porque se ubicaban allí, por ejemplo, fábricas y depósitos de municiones.
Fruto de la reiteración de los aviones italianos, los habitantes buscaron donde cobijarse, y este trabajo recupera la ubicación de 23 refugios antiaéreos. Los hay de todo tipo, desde sótanos adecuados por los propios vecinos hasta los construidos por los poderes públicos.
Pero no había muchos más datos sobre ellos, porque la mayoría estaban sin estudiar. Ahora, en el Arxiu Municipal de l’Hospitalet ha aparecido un nuevo rastro de ellos. Son 24 expedientes de construcción de refugios por parte de la Junta de Defensa Pasiva Local. No se sabe si todos se llegaron a construir, y muchos eran desconocidos hasta la fecha, de tal suerte que la mayoría no son ni siquiera citados en los trabajos sobre esta materia que se han publicado hasta ahora.
Sin embargo, no es una documentación exhaustiva. En realidad sólo son las cubiertas de los expedientes de construcción, encontrados por casualidad. Estas tapas se reciclaron, se les dio la vuelta y se emplearon para guardar otros legajos de obras. ¿Qué pasó con el contenido de las carpetas? Nadie lo sabe aún, pero no sería extraño que se tiraran.
Lo cierto es que al inicio de la guerra se descartó la construcción de refugios antiaéreos en l’Hospitalet, pero ante el recrudecimiento de los ataques aéreos, en 1938 se adoptó esta medida, como constata el hallazgo. Hasta hoy sólo se han conservado dos, y la posterior investigación permitirá conocer si alguno de los ahora descubiertos sigue existiendo bajo el subsuelo.
Además, en el Arxiu Municipal ha aparecido otro documento singular. Se trata del plano elaborado en 1940 por la Junta Local de
EL HALLAZGO El Arxiu Municipal recupera los expedientes de 24 refugios de la ciudad
EL MAPA DE SITUACIÓN Un plano de 1940 detalla la ubicación de las instalaciones dentro de la urbe
Defensa Pasiva, un organismo ya franquista que al parecer heredó las competencias del ente republicano. En este mapa se detalla la ubicación de todos los refugios antiaéreos de la ciudad. Los hay de tres clasificaciones, los construidos por los rojos, los nuevos y los que están en proyecto. Muchos coinciden con los expedientes de 1938 aparecidos, lo que demostraría que existieron. El porqué de esta preocupación es clara: la posibilidad de que la Segunda Guerra Mundial y sus terribles bombardeos sobre ciudades afectara también a España, por lo que se decide mantener, e incluso ampliar, la red de refugios ya existentes. Y es que la memoria y sus cicatrices perviven en los viejos papeles.