La Fiscalía pide para Rato cuatro años y medio de cárcel por las tarjetas ‘black’
Anticorrupción también solicita una pena de seis años para Miguel Blesa, el antecesor del exvicepresidente del gobierno en Caja Madrid
La Fiscalía Anticorrupción entregó al juzgado sus conclusiones sobre el caso de las tarjetas opacas que utilizaron ex altos directivos de Caja Madrid y Bankia. El fiscal considera que Rodrigo Rato, expresidente de Bankia, y Miguel Blesa, su antecesor en Caja Madrid, cometieron apropiación indebida. Además de las penas de cárcel, también pide indemnizaciones.
Llega la hora de la verdad en el caso de las tarjetas opacas de Caja Madrid. La Fiscalía entregó ayer sus conclusiones, en las que pide 4 años y 6 meses de prisión para Rodrigo Rato, y 6 años para Miguel Blesa. Rato presidió Bankia y Caja Madrid y Blesa le precedió en el cargo. El fiscal encargado del caso, Alejandro Luzón, estima que en tales puestos ambos cometieron un delito de apropiación indebida al poner en circulación y usar las tarjetas black. No les acusa, en cambio, de administración desleal, que era otro de los supuestos delitos contemplados desde el comienzo de la investigación, a raíz de la querella presentada por UPyD.
La petición de la Fiscalía Anticorrupción se sitúa en una línea intermedia entre las peticiones que ha realizado el citado partido, actuando como acción popular, y las que ha formulado la representación de Bankia en el proceso. UPyD pidió diez años de prisión para los tres principales imputados en el caso. Su escrito consideraba que los expresidentes de la entidad Miguel Blesa y Rodrigo Rato y el ex director financiero, Ildefonso Sánchez Barcoj habrían incurrido en delitos continuados de apropiación indebida y administración desleal. Bankia, en cambio, estima que la condena debe ser de tres años para Rato y de cuatro para Blesa. Y pide que a Sánchez Barcoj se le imponga un año y seis meses de prisión.
La lista de acusados no se agota aquí. Y las peticiones de cárcel tampoco. La Fiscalía, por ejemplo, acusa a un total de 66 exdirectivos de Caja Madrid –incluidos los ya mencionados-, para los que solicita penas que oscilan entre uno y seis años de prisión. El fiscal Luzón pide, por ejemplo, tres años de cárcel para el exsecretario de Estado de Comercio José Manuel Fernández Norniella y dos años para Barcoj, que fue director general financiero de la entidad, y para el exjefe de la Casa del Rey Rafael Spottorno. También es importante el capítulo de indemnizaciones. La Fiscalía pide, por ejemplo, que Blesa sea condenado a pagar una indemnización de 9,3 millones de euros por los gastos que autorizó para las tarjetas black entre enero del 2003 y el mismo mes de 2010. Rato, a su vez, debería abonar 2,6 millones de euros por los cargos efectuados con dichas tarjetas entre febrero del 2010 y mayo del 2012. En este orden de cosas, el fiscal considera como circunstancia atenuante que once exdirectivos imputados, entre ellos Sánchez Barcoj y Fernández Norniella, hayan devuelto el dinero que gastaron con las tarjetas opacas, reparando el daño económico causado con el uso indebido de esos instrumentos de pago. Paralelamente, la Fiscalía solicita dos años de prisión para una veintena de antiguos miembros del consejo que gastaron más de 50.000 euros, entre ellos el exsecretario de Estado Estanislao Rodríguez-Ponga y el expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán.
El escrito del fiscal Alejandro Luzón subraya que Caja Madrid nunca practicó la correspondiente retención fiscal de estas retribuciones, que cargó en dos cuentas.
Ambos están acusados de apropiación indebida pero no por administración desleal