‘Polònia’ ya tiene su Puigdemont mientras busca el relevo de Mas
Queco Novell debuta como presidente el día que Bruno Oro dice adiós
Nervioso, emocionado y cansado. Así estaba ayer Bruno Oro durante el rodaje del último monólogo pronunciado como president Mas en el Polònia de TV3. Por casualidades de la vida, el paso al lado de Artur Mas ha coincidido también con la decisión del actor de dejar el programa en el que ha trabajado desde el inicio, ya hace una década, para dedicarse a nuevos retos profesionales. El actor se despedirá de la audiencia mañana a las 21.55 horas porque la edición de esta semana se ha trasladado del jueves al sábado a causa de la entrevista insticit tucional al presidente de la Generalitat, que se emitió ayer en el horario habitual del Polònia.
Aunque los responsables del espacio aún no han informado del actor que sustituirá a Bruno Oro en su imitación de Artur Mas, sí se dio a conocer ayer quién será el nuevo president de Polònia: Queco Novell es el escogido para imitar a Carles Puigdemont. Un personaje que han tenido que preparar a toda prisa, comentaba el director del programa Toni Soler, porque su nombre no figuraba en ninguna quiniela. “Sí teníamos preparada en cambio la imitación de Neus Munté, que también debutará ahora,” anunciaba Soler.
Después de rodar el último gag con Bruno Oro, las notas de la canción Changes, del recientemente fallecido David Bowie, sonaron en el plató dando paso a una pequeña celebración con pastel y cava incluido. El actor aprovechó para dirigir unas palabras de agradecimiento a todo el equipo y deseó una “larga vida al Polònia” durante el brindis. Oro se llevó como recuerdo la bandera que se levantaba en cada monólogo, que fue firmada por todos los miembros del equipo.
Para el actor, lo más difícil de decir adiós al Polònia será “dejar de ver a los amigos y compañeros porque acaban siendo como una familia. Ahora me quedaré con un défi- de afecto que tendré que llenar viendo más a mi madre y mis hermanos”, bromeaba.
El motivo principal de tomar esta decisión ha sido “el agotamiento personal de la imitación” y se refiere no sólo al aspecto físico del maquillaje, sino también al encasillamiento que supone como actor: “Tengo muchas ganas de cambiar de registro”. Su proyecto más inmediato es un largometraje que está coescribiendo “con Fernando Trullols donde estará Clara Segura, Nora Navas y Verónica Forqué, entre otros”, y que él también protagonizará.
El personaje de Mas es el que más le ha durado a Oro, que re-
El programa se aplaza a mañana a causa de la entrevista al president que ayer emitió TV3 en el horario del espacio
cuerda también con mucha cariño otras imitaciones, como las de Ángel Acebes, Matías Prats y María Teresa Fernández de la Vega. “De las más divertidas que he hecho”, rememora. Con el president Mas se ha encontrado en cuatro o cinco ocasiones y han mantenido charlas cordiales sin entrar a hablar demasiado de la imitación. “Al principio a nadie le hace demasiada gracia que lo imiten, pero después se acaban acostumbrando”, asegura. ¿Y con qué gag se quedaría? “Quizás con el del Mas Style, que significó un giro para el Polònia porque de repente se hizo muy viral y es muy representativo del éxito del programa”.
“Guapo!, gràcies” y “amb il·lusió” son dos de las frases que han traspasado la pantalla: ¡“Del “guapo!, gràcies” soy un poco el creador, pero las dos exclamaciones son ejemplos de cómo surgen las cosas en el Polònia, donde alguien un día suelta una frase y luego un guionista acaba haciendo bandera”. Oro considera que eso es “fruto de la espontaneidad y de la urgencia” con la que trabajan. “La actualidad nos obliga a hacer malabarismos que a menudo se plasman en soluciones brillantes”.
Para el director Toni Soler, “Bruno es un actor polivalente, muy dotado para la comedia evidentemente, pero que también tiene otros registros y es normal que busque nuevos horizontes”. “Tiene una gran capacidad de dar personalidad a sus personajes, de manera que no son simples imitaciones”, lo define Soler.
Según Soler, se trata de una pérdida insustituible, pero el programa “ha demostrado sobradamente que no depende de nadie y que tenemos actores jóvenes muy buenos, capaces de seguir la estela”. Soler confirmó que ya se había pactado con Oro que terminaría después de Navidad pero que no sospechaban que Mas y Oro acabaran terminando con tan pocos días de diferencia. “Ha sido una despedida feliz y satisfactoria para todos y yo confío en que Bruno sienta añoranza y vuelva pronto”, sonreía Soler.