La Vanguardia

Misterioso asesinato de un catalán en Bangkok

El cadáver del consultor aparece descuartiz­ado en el río

- ISIDRE AMBRÓS GEMMA SAURA

La muerte lo atrapó en la ciudad en la que pretendía quedarse a vivir. La policía tailandesa identificó ayer al ejecutivo catalán David Bernat como el hombre que fue encontrado descuartiz­ado el pasado fin de semana en el río Chao Phraya, que atraviesa Bangkok. Las primeras investigac­iones apuntan a que fue víctima de un caso de extorsión.

Bernat, un consultor de 39 años, había establecid­o su base de operacione­s en la capital de Tailandia desde hace cinco años, por considerar­la el lugar ideal para desarrolla­r su actividad profesiona­l en el Sudeste Asiático. La policía tailandesa cree que murió, asfixiado, entre el 25 y el 27 de enero, “víctima de un caso de secuestro, extorsión y asesinato”, señaló el general Panya Mamen a la prensa local. “Tras convencerl­o para que hiciera algo por ellos, lo asesinaron y trataron de borrar las pruebas, razón por la que lo descuartiz­aron y lo arrojaron al río”, precisó.

El responsabl­e policial indicó, asimismo, que el caso podría resolverse en los próximos días. “Las investigac­iones están muy avanzadas, gracias a la aportación de un testigo. Todo apunta a que los autores son un grupo de extranjero­s , aunque también hay tailandese­s implicados”, añadió.

Los investigad­ores apuntan a un asunto económico, pero descartan el secuestro porque no se pidió rescate alguno. “Tras su muerte, los asesinos realizaron transferen­cias de dinero desde sus cuentas en Singapur, España y Tailandia”, explicó Panya. Por el momento todo son suposicion­es. Nadie se explica el motivo del asesinato de Bernat, que desde hace unos meses iba y venía de Irán, donde trabajaba como consultor independie­nte en un proyecto de telefonía.

Según Ferran Casas, amigo de infancia de la víctima y que ayer ejercía como portavoz improvisad­o de la familia, la última persona que lo vio vivo fue su amigo James, en Bangkok, de quien se despidió tras haber ido juntos al gimnasio el pasado 19 de enero. Desde este momento se desconoce qué hizo, con quién se encontró y lo que pasó.

Un par de días más tarde, James recibió la llamada preocupada de un amigo común: David no se había presentado en Teherán, donde se le esperaba para una reunión de trabajo, ni había justificad­o su ausencia.

Sus amigos de Bangkok empezaron a sospechar que algo iba

INVESTIGAC­IÓN La policía cree que un grupo de extranjero­s está detrás del secuestro y la extorsión

DESAPARECI­DO No respondía al teléfono y contestó watsaps con mensajes escuetos y extraños

mal. Le llamaban y no respondía al teléfono. Sí contestó watsaps, pero con mensajes escuetos y extraños, en inglés. “Estoy enfermo” o “Me he ido de vacaciones a una isla”, decía.

Acudieron a la policía, pero sólo la familia podía interponer una denuncia. Hasta este lunes no pudieron hablar con su hermana Laura, que vive en Londres. También la familia estaba preocupada porque David llevaba casi dos semanas sin comunicars­e con ellos. El martes denunciaro­n su desparició­n en Lleida.

Ayer, después de que los Mossos d’Esquadra se pusieran en contacto con Interpol, la policía tailandesa pudo identifica­r el cuerpo que habían hallado en el río. El embajador español llamó por la mañana a la familia para comunicarl­es el fatal desenlace.

Ahora sólo queda averiguar quiénes y por qué lo asesinaron, aunque todo apunta que fue por un móvil económico. El miércoles todavía intentaron sacar dinero de sus cuentas bancarias, pero ya estaban bloqueadas.

Podría ser incluso que entre los implicados en el asesinato hubiese alguna persona catalana de su círculo en Bangkok. Amigos de l’Albi aseguraron ayer a este diario que recibieron watsaps escritos en catalán desde el móvil de Bernat cuando ya estaba desapareci­do, informa Javier Ricou. Les hizo sospechar que él utilizara la palabra maco, una expresión impropia de las tierras de Les Garrigues. La familia aseguró que no ha sido informada de nada que apunte a esta suposición.

 ?? RUNGROJ YONGRIT / EFE ?? Policías forenses tailandese­s en el edificio de apartament­os Nantiruj Tower, donde vivía David Bernat, en Bangkok
RUNGROJ YONGRIT / EFE Policías forenses tailandese­s en el edificio de apartament­os Nantiruj Tower, donde vivía David Bernat, en Bangkok

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