Un pequeño gran paso en Japón
El desencadenante fue una simple consulta, pero el resultado va camino de alterar las reglas sociales en Japón. El resultado más inmediato y palpable, por el momento, es que el gigante de la electrónica nipona Panasonic ha anunciado el reconocimiento de las uniones civiles entre personas del mismo sexo, a quienes concederá los mismos beneficios laborales que a los matrimonios heterosexuales. Una iniciativa sin precedentes en el ámbito de las grandes corporaciones de un país en el que las bodas entre persona de un mismo sexo no están legalizadas.
El colectivo homosexual de Japón ya tiene su líder. Un personaje anónimo, pero una persona que con su iniciativa posiblemente cambie la vida de los alrededor de los nueve millones de homosexuales que se estima que forman parte de la sociedad japonesa. Se desconoce su nombre, sexo y responsabilidad laboral, pero su consulta a la empresa donde trabaja ha abierto la puerta a que las parejas gays vean reconocidos sus derechos sociales.
Su protagonismo fue involuntario y seguramente no esperaba que tuviera tal repercusión. El verano pasado expresó a la empresa su interés en contraer una unión civil homosexual y en averiguar si dispondría de las mismas ventajas que sus colegas heterosexuales.
La demanda posiblemente generó en un primer momento una situación embarazosa en Panasonic, ya que la Constitución japonesa no reconoce las uniones de parejas del mismo sexo. Sin embargo, la empresa de Osaka, que emplea a más de 250.000 personas, adoptó una decisión audaz, como muy pocas firmas japonesas de su envergadura han hecho hasta ahora. Optó por reconocer las uniones civiles homosexuales. Una política que ya aplica en aquellas países donde el matrimonio gay está reconocido.
“Somos una empresa global y ya hemos tenido casos así en EE.UU. y Europa, donde los empleados homosexuales fueron tratados sin discriminación”, dijo la portavoz de Panasonic, Yayoi Watanabe, según NDTV.
Una decisión que supone un fuerte respaldo a las reivindicaciones de los derechos de los homosexuales nipones y que se suma a las iniciativas de algunas administraciones locales, como la de Shibuya, en Tokio, que desde noviembre pasado emite certificados de uniones civiles entre personas del mismo sexo.
En Japón, la compañía ha decidido aplicar los cambios en su política de personal a partir de abril, según el diario Asahi de Tokio. Desde este momento, permitirá a sus empleados emparejados en uniones civiles homosexuales disfrutar de baja por enfermedad o fallecimiento y recibir compensaciones económicas en estos casos. Concederá, asimismo, ayudas económicas a los que contraigan una unión civil homosexual para cubrir los gastos del enlace.
Para ello, la empresa ya ha anunciado cambios en su normativa interna. Modificará los conceptos de matrimonio y cónyuge, para incluir a las parejas del mismo sexo en sus reglamentos laborales, y adaptará el código de conducta para sus empleados para combatir la discriminación por motivos sexuales.
Su iniciativa ha topado, sin embargo, con un problema burocrático que aun no ha resuelto. El de definir el tipo de documentación que requerirá para reconocer las uniones del mismo sexo. Un escollo complicado ya que en Japón hay muy pocas administraciones locales que emitan certificados que reconozcan este tipo de uniones.
Los expertos califican la iniciativa del gigante de la electrónica de consumo japonesa como un espaldarazo al reconocimiento de los derechos de los homosexuales en el país y confían en que, dado el tamaño de Panasonic, otras compañías podrían seguir su ejemplo. “A partir de ahora podemos esperar que se produzca un efecto dominó entre numerosas compañías japonesas”, ha señalado Ayumu Yasutomi, profesor de Ecología Social de la Universidad de Tokio, al diario Mainichi de la capital japonesa.
Los expertos confían en que se produzca un efecto dominó entre las empresas japonesas