Rajoy cree “poco serio” el documento para la investidura de Sánchez
Ni de investidura, ni de gobierno, ni para reformar la Constitución. El pacto alcanzado por el PSOE y por Ciudadanos es, para Mariano Rajoy “poco serio”. No es de investidura porque “no tiene votos suficientes”, y no es un pacto de Gobierno porque se pactan “tres cosas por ahí, cinco cosas por aquí, pero no se sabe exactamente en qué va a consistir la acción de Gobierno”. Y no es de reforma constitucional porque sin el apoyo del PP no se podrá hacer ninguna reforma constitucional.
Así pues, el acuerdo entre socialistas y Ciudadanos es, principalmente, “un acto de propaganda po- lítica” que para Rajoy no soluciona los problemas de los españoles, poco preocupados por si hay o no diputaciones, y no genera confianza ni crea empleo.
Lo que más le sorprende a Rajoy, según confesó en una entrevista en Antena 3 Televisión, es “el gran entusiasmo de Ciudadanos por apuntalar al PSOE, porque primero le dio la presidencia de las Cortes cuando el PP había sido el partido más votado, y ahora parece que quiere hacer presidente al señor Sánchez”.
La estrategia del PP va ahora para hacer hincapié en que Ciudadanos ya ha demostrado quien es, y no era un aliado del PP, como creyeron una parte de los votantes populares que el 20-D votaron a Rivera, sino que Ciudadanos es más afín al PSOE, como el PP advertía en campaña. de hecho, el tuit que el PP colgó nada más firmarse el acuerdo: “Ciudadanos se retrata y abandona a sus votantes”. El PP de inmediato se apresuró a dejar claro que los 123 diputados del PP votarán “no” en la investidura porque “no van a ser costaleros de Sánchez”.
Así que el PP se mantendrá a la espera de que el día 5 de marzo Sánchez fracase en su investidura, para retomar la iniciativa que perdió cuando el Rey le encargó a Sánchez intentar formar gobierno, ante la postura del presidente del Gobierno en funciones, que le insistió en que no contaba con votos suficientes para asumir el encargo. Una decisión de la que Rajoy no se arrepiente, aseguró.
Retomará la iniciativa y lo hará con la exigencia de que sea el PP, y él mismo, quienes tengan el Gobierno, porque está convencido que él no es un escollo, todo lo contrario. “Yo desde luego no soy un escollo para el pacto” y por eso no se ha planteado dar un paso atrás. Ni siquiera lo pensará si el proceso de investidura falla y hay que ir de nuevo a las elecciones. “Es mi intención ser el candidato su hay nuevas elecciones. Pero vamos, no tenga usted la más mínima duda”.
Rajoy no sólo no cree que sea un lastre para el PP, sino que ha llegado a la conclusión contraria: “He llegado a la conclusión de que soy un activo, si no, no me presentaría, no soy tan irresponsable”. Está convencido de ello porque “tener un líder independiente que es capaz de mantenerse en situaciones difíciles”, es lo que se necesita.