Los incidentes en Bilbao empañan el pleno español
Sillas volando, destrozo de mobiliario urbano, lanzamiento de bengalas, peleas y disturbios en bares, carreras por las calles y cargas de la Ertzaintza. Las imágenes de violentos causando altercados volvieron ayer a Bilbao, antes del Athletic-Olympique de Marsella, en el que los de Valverde se clasificaron para los octavos de la Europa League con mucho sufrimiento, gracias a un gol de Sabin Merino en el minuto 81.
Las calles que desembocan en San Mamés fueron escenario de altercados provocados por aficionados violentos del Olympique, que se enfrentaron a los aficionados locales y a la policía, que intervino para aislar a la afición marsellesa. Algunas fuentes indican que los ultras de los dos equipos se citaron en el parque de Doña Casilda para pelear y que hinchas radicales del Girondins viajaron desde Burdeos para apoyar a los vascos en el enfrentamiento. Los incidentes acabaron con cinco detenidos y tres heridos (dos ertzainas y un aficionado rojiblanco que recibió cortes en el cuello).
En el estadio, el Olympique de Míchel dominó en la primera parte y Batshuayi marcó en el minuto 40. Pero el Athletic controló mejor los nervios en la segunda mitad y la angustia se acabó cuando Sabin remató un centro de Susaeta y anuló la amenaza de prórroga.
El Valencia cumplió el trámite en Viena y volvió a golear al Rapid (0-4). En Nápoles, el Villareal vio como Hamsik empataba la eliminatoria con un gol en el minuto 17 al que respondió Pina en el 59. El 1-1 clasificó al submarino. Y el Sevilla, con la eliminatoria encarrilada en la ida (3-0), perdió (1-0) ante el Molde. Marcó Hestad para los noruegos al filo del descanso.
El Manchester United se clasificó con más apuros de los que deja ver el marcador al derrotar al modesto Midtjylland danés (5-1), que había ganado en la ida y que anoche marcó primero en Old Trafford.