Florentino Pérez y Cristiano Ronaldo, en el punto de mira
Agotado el efecto Zidane, el club prepara cambios y se aferra a la Champions
El madridismo volvió a vivir ayer otro domingo de resaca de pesadilla, algo a lo que se viene habituando con mucha frecuencia esta temporada. La derrota ante el Atlético retrotrayó al club a dos meses atrás, cuando el Bernabeu despedía a su equipo de pañolada en pañolada y Florentino Pérez escuchaba como todo el estadio pedía su dimisión a gritos. Desde la zona noble del club, y de puertas para afuera, el mensaje es transmitir calma y aguantar hasta la eliminatoria contra el Roma, que viene muy de cara por el 0-2 de la ida. Si el Madrid se mete en cuartos de final eso garantizaría una Semana Santa tranquila e incluso, con un sorteo favorable, el equipo podría meterse en semifinales, a sólo tres partidos de ganar la Champions. Son las cuentas de la lechera, pero no hay otra fórmula.
Acabe como acabe la temporada –y no pinta nada bien– , la sensación generalizada en el entorno de Florentino Pérez es que se avecina un lavado de cara muy importante en el vestuario. Cuestionado como nunca Cristiano a sus 31 años, el portugués podría estar viviendo sus últimos meses de blanco, más si cabe si como teme el club el Madrid reedita lo que le pasó al Barcelona: poder contratar en la siguiente ventana de fichajes porque dispone de la cautelar pero no en las dos siguientes. Parte de la directiva aconseja a Florentino Pérez que se venda también a Bale, un jugador del que nadie duda de su calidad, pero que ha demostrado que no puede jugar dos partidos por semana sin romperse. Otro jugador sobre quien subsisten muchas dudas es Karim Benzema, aunque en este caso el presidente es partidario de retenerle a menos que su situación judicial le acabe apartando de los terrenos de juego.
El club ya ha filtrado quienes son los elegidos para encabezar el siguiente proyecto: De Gea en la portería; Paul Pogba para reforzar el centro del campo; Eden Hazard de media punta y Lewandowski como nueve puro. En ningún caso son contrataciones fáciles ni baratas.
Todo esto no convence para nada a una oposición a Florentino Pérez que lo que pide no son cambios de jugadores sino un cambio de modelo en la gestión del club. El ex presidente Ramón Calderón, ahora peleado con Florentino pero muy amigos en la etapa de oposición a Ramón Mendoza, pedía ayer vía Twitter que el madridismo se
movilice contra Florentino Pérez presentándose en las elecciones a compromisario, para lo que tienen de plazo hasta el 23 de marzo. El 10% de los compromisarios (unos 210) puede forzar en la próxima asamblea, a celebrar en septiembre u octubre, una moción de censura contra el presidente. En la misma línea se expresó también ayer Eugenio Martínez Bravo, líder de Plataforma Blanca, uno de los dos grupos opositores formalmente organizados: “Hay vientos de cambio y de regeneración en España y en el mundo. Lástima que no sea así como Florentino piense para el Real Madrid. Socio del Real Madrid, po- demos hacer algo por nuestro club: intentar ser socio compromisario. Nuestra voz necesita ser escuchada”, escribía Martínez Bravo.
Martínez Bravo no salió compromisario en las últimas elecciones, a su juicio, por maniobras oscuras de Florentino. Sí salió elegido Carlos Mendoza, presidente de Valores del Madridismo, una asociación más reciente –fue creada en el 2010– y que es la que ha mantenido contra viento y marea la bandera de la oposición en las últimas asambleas. Valores del Madridismo lleva meses pidiendo la dimisión de Florentino y la elección inmediata de un nuevo presidente.
OPERACIÓN LIMPIEZA Hay dudas sobre seguir con Bale y Cristiano y se quiere traer a De Gea, Pogba, Hazard y Lewandowski
MANIOBRAS ELECTORAL ES La oposición pide a los socios que se presenten a compromisarios para forzar una moción de censura
Las elecciones tocan en junio del 2017. Florentino ya ha dicho por activa y por pasiva que no piensa anticipar la fecha. Un grupo de socios pleiteó en los juzgados contra él por el cambio de estatutos. La juez falló contra los socios, pero siempre se ha dicho que Florentino tiene mandíbula de cristal y la presión del Bernabeu puede ser muy fuerte en los próximos meses. Ante el Atlético se cumplieron los diez años de su primera dimisión.