La mejora de la recaudación
La Generalitat tiene cedida la ejecución y la liquidación efectiva de sus impuestos (que ahora sólo suponen un 5% de todos los impuestos que pagan los catalanes), un servicio por el que el año pasado pagó 35 millones de euros: 10 millones al Ministerio de Hacienda español y otros 25 millones a los registradores de la propiedad. Preguntado por Josep Cuní, en el programa 8 al Dia, sobre esta situación “paradójica”, el vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, reconoció que “es un modelo ineficiente” y que “está muy alejado de la situación que quisiéramos, lo que significa que nos queda mucho trabajo por hacer”. Junqueras explicó que el control efectivo de estos impuestos es el primer paso para asumir la gestión de los impuestos masivos (IVA, IRPF, Sociedades) que es “el gran objetivo que tenemos como Govern”. “Cuando tengamos Hacienda propia gestionaremos 2,5 veces más que ahora, y además nos ahorraremos dinero”.