El Govern lanza una ofensiva por el eje mediterráneo
Reactivar el frente común en defensa del corredor mediterráneo para presionar al Gobierno español y denunciar ante la Unión Europea (UE) los incumplimientos de las autoridades españolas es uno de los objetivos que en estos momentos tiene entre manos el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. Y con este propósito ha iniciado contactos a fin de constituir una mesa estratégica entre administraciones y agentes económicos y sociales, según anunció ayer en la sesión de control en el Parlament.
La idea es que en esta mesa estén presentes, además de Catalunya –y Baleares, que apoya plenamente el proyecto–, Valencia y Murcia, e incluso Andalucía si lo desea, con sus respectivos gobiernos, las cámaras de comercio, las patronales y los sindicatos. El próximo lunes se producirá, en este sentido, una reunión entre el conseller de Territori i Sostenibilitat de Catalunya, Josep Rull, y la consellera de Habitatge, Obres Públiques i Vertebració de Valencia, María José Salvador, “para empezar a tejer las alianzas imprescindibles para que el corredor mediterráneo vaya prosperando”, subrayó el presidente de la Generalitat. Valencia, precisamente, destapó la pasada semana la caja de los truenos por los retrasos en la ejecución del eje mediterráneo y decidió constituir su propia plataforma, también con agentes políticos, económicos y sociales, para reclamar de nuevo la realización de la infraestructura. Ahora, la ofensiva del Govern va un poco más allá y, de cuajar, permitiría recuperar, en la práctica, el lobby regional que ya funcionó antes de que la UE optara por considerar estratégico y prioritario el corredor mediterráneo y no el central.
Carles Puigdemont consideró que el corredor mediterráneo es una “prioridad absoluta” para el Govern y lo definió como un “eje de cohesión social, de creación de riqueza y de creación de oportunidades” que entiende que Catalunya no puede dejar de reivindicar. Muy al contrario, el propósito es que “no sólo no rebajaremos el nivel de reivindicación y exigencia a la administración española de los cumplimientos inexcusables para los ciudadanos de Catalunya y de esta parte de Europa, sino que pasaremos aún más a la acción”, advirtió el presidente de la Ge- neralitat, que aseguró que la intención es llevar también el caso a la UE. “Explicaremos a las instituciones de la Unión Europea que el Estado español no cumple y que el incumplimiento del Estado español lo paga el conjunto de Europa”, enfatizó.
“Nos sentimos no solos del todo, porque hay noticias positivas desde Valencia y Baleares, pero sí solos en relación con el Estado español en la defensa de una infraestructura que la UE ha considerado prioritaria”, remachó Carles Puigdemont.
Puigdemont reactiva el frente común para presionar al Gobierno y denunciar a la UE los incumplimientos