“Al que no quiero es al Barça”
Luis Enrique dice que no le gustaría tener que enfrentarse con su equipo en cuartos
Luis Enrique no dudó en mojarse. Pensó que el equipo necesitaba hacer una buena salida de partido y no le importó que diluviase. Se plantó en el área técnica y no paró de insuflar intensidad y seriedad a sus jugadores. La lluvia le mojaba pero estaba mandando un mensaje. El pase a cuartos no estaba hecho y había que ratificarlo. En cambio, a escasos metros, Arsène Wenger no salió del banquillo hasta el minuto 35. El alsaciano no lo hizo para dar instrucciones sino para protestar al colegiado una amarilla a Gabriel. Por entonces ya no llovía sobre el Camp Nou. Son dos estilos opuestos. Les separan varias generaciones. Uno está en la recta final, en un declive sostenido y el otro está en pleno apogeo.
“Es una gran noche para nosotros”, se congratuló por la clasificación, la novena seguida entre los ocho mejores de Europa. “Son unas estadísticas únicas. No sé si hay otro club que haya estado en nueve años seguidos en los cuartos de final. Demuestra el nivel de estos jugadores y el buen trabajo del club”, quiso compartir el técnico el éxito. Por eso, también tuvo palabras de agradecimiento con el público. “Quiero felicitar a la afición porque pese a la lluvia ha estado donde la necesitábamos”.
Una vez en el bombo, la pregunta estaba clara: ¿hay preferencias? Luis Enrique no se mojó, como no ha hecho hasta ahora, pero sí que vino a decir que el coco de los cuartos es el actual campeón, el que seguro que no quieren el resto de cuarto finalistas. “El único que no quiero que me toque es el Barça. Y ese se- guro que no me toca. Así que estoy tranquilo”, apuntó. Sobre la clasificación in extremis del Bayern, el entrenador barcelonista se alegró por su amigo Guardiola. “Estoy contento por Pep. Se lo merece. Está en su último año en el Bayern y sus equi- pos nunca se dan por vencidos”.
Wenger, sabio y veterano, apareció en la sala de prensa hablando ya de la liga. “Nos han eliminado y nos tenemos que concentrar en la Premier”, enfocó. Y quiso sacar brillo al haber plantado cara al Barça. “Con el 1-1 hemos puesto nervioso al Barça. Hemos perdido contra los tres mejores delanteros que he visto. De la nada crean ocasiones. Hacen cosas excepcionales. Transforman el fútbol en arte. A mí me ha tocado sufrirlo varias veces pero es digno de admiración”, se rindió. Hablaba de Messi, Neymar y Luis Suárez, sus verdugos.
“Es un cariño recíproco el que sienten entre ellos y el que tienen con el equipo. Estamos encantados de que sean nuestros delanteros. Tenemos jugadores de un perfil único, que individualmente son capaces de solventar cualquier situación pero lo importante y la grandeza de este equipo es que todos ellos están a servicio del equipo”. Por eso, nadie quiere al Barcelona.
“Son unas estadísticas únicas. Demuestran el nivel de los jugadores y del trabajo del club” “Estoy contento por Pep. Se lo merece. Está en su último año en el Bayern y sus equipos no se rinden” “Hemos perdido contra los tres mejores delanteros: transforman el fútbol en arte”