El Pirineo espera cerrar la mejor Semana Santa de los últimos seis años
Las condiciones no pueden ser mejores y ahora sólo falta que se cumplan las previsiones. En el Pirineo y concretamente en todos los negocios relacionados con el turismo se respira estos días mucho optimismo. Y es que se espera que la ocupación para esta Semana Santa alcance cifras no vistas desde hace seis años. Son las previsiones del Patronat de Turisme de la Diputació de Lleida (exportables al resto de zonas de montaña catalanas) que auguran un incremento del 15% –respecto a las cifras del pasado año– en el número de visitantes esperados entre el Jueves Santo y el lunes de Pascua. Sólo en el área de Lleida se prevé ingresar, con esos turistas, alrededor de treinta millones de euros durante este largo puente.
Los destinos más solicitados a estas horas son los cercanos a las pistas de esquí. Las estaciones encaran esta Semana Santa (en su globalidad) con unas condiciones exce- lentes para la práctica de este deporte después de una temporada con muchos altibajos por la falta de nevadas.
Las últimas precipitaciones, desde la Cerdanya hasta Val d’Aran, han cambiado la estampa y los complejos podrán ofrecer esta próxima semana a sus clientes la práctica totalidad de sus dominios esquiables.
En los establecimientos hoteleros cercanos a pistas la ocupación, según las reservas cerradas hasta la fecha, ronda el cien por cien. El turismo rural de las zonas del interior augura también una buena Semana Santa, según las previsiones de la Diputación de Lleida, con más del 85% de las plazas ocupadas.
El optimismo sólo podría verse
Las estaciones de esquí presentan hoy el mejor estado visto en toda esta temporada, con contadas nevadas
truncado por culpa del clima. Un tema que preocupa especialmente a los empresarios turísticos y más desde hace un par de semanas, cuando las alertas lanzadas por el primer temporal de nieve en cotas bajas pasaron una cara factura al sector. Se anularon más del 50% de las reservas a pesar de que la nevada fue menos intensa de lo anunciado. La Diputación de Lleida aprobó ayer en pleno una moción para pedir a la Generalitat que mida sus mensajes en esas alertas.