Con los dedos de una mano
El Barça necesita cinco victorias, a falta de ocho partidos, para renovar el título
El empate en El Madrigal después de 12 victorias consecutivas en el campeonato supone un punto de insatisfacción para un barcelonismo que dos días antes había aceptado con resquemor el emparejamiento contra el Atlético en los cuartos de la Liga de Campeones. Pero juzgado en su justa medida, y de manera independiente de la irregular actuación del equipo, un punto en el campo del Villarreal, donde este curso han caído el Atlé- tico y el Real Madrid y sólo el Celta había conseguido marcar dos goles, repercute significativamente en la lucha por el objetivo. El Barcelona puede contar con los dedos de una mano la cifra de victorias que precisa para proclamarse matemáticamente campeón: cinco, a falta de ocho jornadas. Dicho de otra manera, el equipo de Luis Enrique puede permitirse tres derrotas aunque el perseguidor se imponga en todos sus compromisos. Está en disposición de cantar el alirón en la jornada del 24 de abril, justo antes de afrontar una hipotética eliminatoria de semi- finales de la Champions League.
El desafío empieza el 2 de abril en el clásico del Camp Nou, prosigue con una visita a Anoeta –donde el Barça acumula cinco años sin ganar–, la recepción al Valencia, el desplazamiento a A Coruña y el paso del Sporting por Barcelona. El conjunto blaugrana puede proclamarse campeón contra el conjunto asturiano, el equipo de Luis Enrique.
Evidentemente, un triunfo hubiera colmado las aspiraciones blaugrana, pero el empate en El Madrigal no es un resultado despreciable de ninguna manera en un partido muy condicionado por la actuación arbitral. Sánchez Martínez, que sólo tenía un precedente con el Barcelona y concluyó con el mismo resultado (2-2 ante el Deportivo en diciembre en el Camp Nou), recibió airadas críticas del equipo y la afición local. Las protestas por no sacar la segunda amarilla a Piqué dieron origen a la expulsión de Marcelino, y la señalización del penalti sobre Neymar provocó una serie de insultos de Soldado al brasileño. “Payaso, eres un payaso”, le dedicó el delantero local antes de ser reprendido por Busquets. Neymar ha provocado 7 de los 16 penaltis decretados a favor del Barcelona en el actual campeonato, cifra que iguala el récord del Betis que data de la temporada 1986-87. Aunque no puede atribuirse la trayectoria blaugrana a la fábrica de penaltis de Neymar. En primer lugar, porque los lanzadores han desperdiciado la mitad de las ejecuciones, y en segundo, porque únicamente dos decretos se han producido en un contexto de marcadores ajustados. En Villarreal, Neymar convirtió con hielo en las venas, esperó a que Asenjo se lanzara y facturó un disparo tibio por el centro de la portería.
Asenjo insiste en que no cometió ninguna infracción: “No fue penalti, un portero sabe cuando hace penalti”.
EL FABRICANTE Neymar ha provocado 7 de los 16 penaltis que han favorecido al Barça en este campeonato, un récord