Combatir la aporofobia
Aporofobia: odio y desprecio al pobre. Las imágenes de hinchas vejando a mendigos en Madrid, Barcelona y Roma son aporofobia en estado puro. En los tres casos, los aporófobos –cuyos actos fueron cientos de veces reproducidos a través de los vídeos colgados en la red– actuaron en grupo, envalentonados por un sentimiento ruin y moralmente reprobable hacia el pobre. Los expertos alertan de que este tipo de comportamientos suceden cuando la persona que humilla y veja da por supuesto que la víctima no tiene nada que ofrecerle a él, y eso le hace sentirse superior. El gregarismo y el alcohol actúan como desinhibidores y garantizan la burla hacia aquellos más vulnerables, cuando no la agresión. El odio crece, añaden los psicólogos, si se piensa que el indigente ha llegado ahí por su culpa. Para acabar con la aporofobia, además de educación y valores morales, habría que cuestionar por qué la sociedad y los gobiernos consienten la pobreza.