MÁS DE LO QUE CREES
El consumo del agua es muy superior al que percibimos
Probablemente, si a los ciudadanos les preguntaran por su consumo de agua, la mayoría consultaría las facturas de su compañía suministradora en el hogar o haría un cálculo aproximado de la cantidad de líquidos envasados que compra. Sin embargo, muy pocos pensarían en el agua que se ha utilizado en la fabricación de todos los productos que usan cotidianamente. De hecho, la primera vez que a alguien se le ocurrió plasmar esta idea en forma de huella hídrica fue en 2002: Arjen Hoekstra, profesor de Gestión del Agua de la Universidad de Twente (Holanda) acuñó entonces el concepto de huella hídrica, un indicador que mide el volumen total de agua dulce utilizada para producir los bienes y servicios consumidos por un individuo o comunidad, tanto de forma directa como indirecta. Es decir, la huella hídrica evalúa la cantidad de agua consumida o bien devuelta al medio con distinta calidad de la que tenía en origen o a otra cuenca. En opinión del profesor Hoekstra, “si las empresas son obligadas en el futuro a ser transparentes y a estudiar y revelar la huella hídrica de sus productos, tendrán un incentivo mayor para fabricar artículos más sostenibles”.
LA ROPA DE PIEL, LA MÁS “SEDIENTA”
En España, la huella hídrica es de 2.325 m3/cápita (aunque el 36% se origina fuera)
Los tejidos de algodón y la piel de bovino se cuentan entre los que llevan oculto un mayor consumo de agua. Así, para fabricar un bolso de cuero se han podido llegar a utilizar 17.093 litros de agua, en la confección de un pantalón vaquero, 10.850 litros y en la producción de un kilo de bistec de ternera, 15.400 litros, según cálculos de la Water Footprint Network. Para entender estas cifras tan llamativas ayuda remitirse a un dato clave sobre el origen de los productos: los sectores agrícola y ganadero son los que consumen más agua, muy por delante del industrial. En concreto, el 95% del consumo de agua asociado al vaquero se produce antes de que el algodón se emplee para producir la fibra, mientras que el 5% restante se da durante el proceso de fabricación. Por otra parte, hay que tener en cuenta que en general, los alimentos y productos de origen animal generan un mayor consumo puesto que implican más procesos de transformación.
CÓMO SE CALCULA LA HUELLA HÍDRICA
El uso del agua se mide en términos de volúmenes de agua consumidos (evaporados o incorporados a un producto) y / o contaminados por unidad de tiempo. Una huella hídrica se puede determinar para un producto en particular, para cualquier grupo bien definido de consumidores (por ejemplo, un individuo, familia, pueblo, ciudad, pro- vincia, estado o nación) o productores (sea una organización pública, empresa privada o sector económico). Como tiene dimensión temporal y espacial, se debe calcular con datos recogidos en un período de tiempo concreto (habitualmente un año) y en un lugar geográfico perfectamente delimitado.