AGBAR, CAMBIO DE SEDE… Y DE CHIP bici o paseos culturales a los que el trabajador puede ir con su familia. Tras el cambio de sede, Agbar cuenta con una sala de lactancia. Garantiza plaza de parking –donde aparcar el coche o la moto– y dispone de máquinas
“Cuando hace un año iniciamos el traslado de la Torre Agbar a la Ciutat de l’Aigua, sabíamos que no se trataba de replicar la torre en otro edificio, sino que era el momento de avanzar hacia una nueva manera de trabajar”, explica Sandra Tobías, directora de Organización de Agbar. A los cambios en el entorno de trabajo –los empleados ya no tienen una mesa fija, sino que utilizan los espacios según sus necesidades, disponiendo de zonas de trabajo de concentración y también de colaboración–, se suman aquellos que mejoran la calidad de vida: la compañía tiene en marcha el programa “Hábitos saludables”, con el que mejoran su bienestar físico y emocional mediante el ejercicio físico, la nutrición y la salud emocional.
“La compañía, además, ha creado el portal web interno www.practicahabitossaludables.com, donde se publican consejos, artículos y conferencias para que los trabajadores puedan llevar una vida lo más saludable posible”, explica Àngels Valldeperas, directora de
marketing y comunicación corporativa y directora de Hábitos saludables.
La nueva sede dispone de un gimnasio de uso exclusivo para los trabajadores y en el que se organizan actividades dirigidas y relacionadas con el bienestar: clases de zumba, spinning, yoga, talleres de risoterapia… La empresa, además, ha firmado convenios con diferentes centros, entre ellos las Piscinas Picornell, para que los trabajadores puedan ir a nadar. Y los fines de semana se organizan actividades familiares, como senderismo, rutas en
FLEXIBILIDAD HORARIA
En la Ciutat de l’Aigua también se ofrece a los empleados la posibilidad de flexibilizar la hora de entrada entre las 7:30 h y las 10:00 h de la mañana, a la que pueden acogerse de forma voluntaria. Esta opción busca facilitar el acceso al centro de trabajo en las horas de mayor congestión. Y en diciembre se inició el piloto de flexibilidad externa, que ha finalizado este mes de marzo. “Durante el primer trimestre del año, 80 empleados han realizado el 20% de la jornada semanal desde su domicilio, lo que equivaldría a un día entero de trabajo o dos mañanas o dos tardes por semana”, explica Tobías. Ahora el piloto se encuentra en fase de análisis, para ver si es viable extender la medida a los demás trabajadores.
Todas las medidas de flexibilidad y bienestar del trabajador se deciden e implementan mediante procesos participativos, según las necesidades detectadas, y a la vez se están empezando a implantar en los demás centros de trabajo del grupo.