La medicina regenerativa, clave para reparar lesiones de huesos y tejidos
La aplicación de la medicina regenerativa en traumatología y reumatología centrará la jornada que mañana se celebra en el hotel Majestic de Barcelona (18 horas), a la que asistirán más de un centenar de traumatólogos de toda España. Organizado, entre otros, por el Instituto de Traumatología de Barcelona y por el Biotechnology Institute de Gasteiz, los cuatro ponen- tes de la jornada hablarán sobre los beneficios de lo que en el 1987 se llamó ingeniería de tejidos, como sinónimo de medicina regenerativa, clave en la reparación o regeneración de células, tejidos u órganos para restaurar la función dañada, tal y como explica el doctor Fernando Kirchner, médico especialista en ortopedia y traumatología.
El doctor Kirchner, que cerrará la sesión con una ponencia sobre la aplicación terapéutica del plasma rico en factores de crecimiento (PRGF) en traumatología, no duda en calificar de revolucionaria una técnica que reduce considerablemente la recuperación de cualquier lesión ósea y sin efectos colaterales. Su aplicación en las lesiones deportivas es “incuestionable”, así como en la regeneración de tejidos, como es el caso de la artrosis.
¿Cómo funciona? Se obtiene sangre periférica, se procesa y se selecciona la parte que lleva células madre y plasma rico en proteínas, aplicándose directamente sobre la lesión, señala el doctor Kirchner. Son precisas al menos tres aplicaciones.
El plasma rico en proteínas se aplica en lesiones de huesos, úlceras cutáneas, rupturas y lesiones inflamatorias tendinosas, artrosis de rodilla, cadera, tobillo y deformantes de mano, así como en columna vertebral tanto lumbar como cervical produciendo una rápida regeneración celular y extracelular de los tejidos dañados o envejecidos.
Y aunque la traumatología y la medicina deportiva han sido las primeras grandes beneficiarias de la aplicación de este concentrado, actualmente se aplica en infinidad de recursos terapéuticos (combinado con células madre) para reconstruir lesiones graves como ablaciones mamarias o de orejas o de narices enteras. También se aplica cotidianamente en oftalmología, medicina estética, cirugía implantológica dental o úlceras diabéticas.
Entre los ponentes figuran el doctor Eduardo Anitua, precursor y pionero de esta técnica en la práctica médica, y el doctor Ramón Cugat, quien la ha aplicado desde sus comienzos en el año 1999 a numerosos deportistas de élite. También la bióloga María Isabel Bahamonde.