Falta de comunicación

Hay que mejorar la comunicación dentro de la familia. La incomunicación entre cónyuges y entre padres e hijos está socavando las raíces del grupo más importante de nuestra sociedad. La prueba de ello es la cantidad de casos en los que entre miembros familiares de primer grado se desconocen las acciones de esposos o hijos.

Muchos ejemplos aparecen en diarios, radio y televisión: alguna ministra que no sabe qué hace un coche de gama alta en su propio garaje propiedad de su marido, aristócratas que desconocen los negocios de su esposo, comisarios europeos que no tienen noticia de empresas de su esposa situadas en paraísos fiscales, esposas que no se atreven a preguntar a su cónyuge cómo es que está aumentando exageradamente su nivel de vida, expresidentes autonómicos a los que sus hijos no explican la forma en que se ganan la vida, esposas ignorantes que no saben responder a un juez sobre las actividades de su marido y muchos otros ejemplos. Es necesario replantearse esta situación.

Necesitamos que mejoren estas relaciones en las que la falta de confianza entre sus miembros puede llegar a deteriorar el orden familiar. Si no, ¿adónde iremos a parar? ÁNGEL SERRANO VIDA Badalona