Cameron publica sus impuestos para intentar descafeinar el efecto Panamá
Sus ganancias desde el 2009 se elevan a un millón de libras, sus tasas, a 400.000
David Cameron se convirtió ayer en el primer ministro británico desde la creación de este puesto en 1721 que publica su declaración de renta. En otras circunstancias, el gesto hubiera sido celebrado como histórico ejemplo de transparencia. Sin embargo, es la maniobra que el líder tory ha emprendido para intentar calmar la tormenta que se ha cernido sobre su futuro político y el de su campaña por la permanencia del Reino Unido en la UE después de que admitiera haber tenido en el pasado acciones de una empresa offshore dirigida por su padre en Panamá.
Cameron dio a conocer sus últimas seis declaraciones de renta, desde 2009, cuando aún era jefe de la oposición, hasta la del año pasado, la quinta como primer ministro. En ese periodo ha ganado más de un millón de libras (1,1) y ha abonado 400.000 en impuestos. En la primera etapa y con un sueldo de 129.000 libras, pagó unas 43.000 (unos 51.000 euros). Ya al frente de Downing Street, recibió unos honorarios cercanos a los 200.000 libras (excepto en su primer ejercicio, en el que cobró 157.000). Fue en la renta del 2011 en la que tuvo que abonar más tasas, 77.000 libras (92.000 euros). El sábado, el primer ministro reconoció su error por haber poseído acciones en una empresa radicada en un paraíso fiscal y aseguró que iba a “aprender la lección”.
Aunque Cameron pagó los impuestos derivados de los beneficios que le rentaron esas participaciones y no incurrió en ninguna ilegalidad, sus rivales en la oposición laborista se han lanzado contra él. No sólo eso, los opositores euroescépticos dentro de su propio partido se han estado frotando las manos, viendo cómo su desliz les da alas de cara al inminente referéndum sobre la continuidad o salida del Reino Unido de la Unión Europea.
El primer ministro conservador ha contraatacado, incluso antes de lo que había anunciado, pero con ello también ha dejado a la vista cuantiosas sumas de dinero en concepto de donaciones y regalos. Así, a las 300.000 libras (360.000 euros) que Cameron recibió como herencia tras la muerte de su padre, las declaraciones ahora presentadas muestran sendos pagos de 100.000 libras en los meses de mayo y julio de 2011 efectuados por su madre a modo de regalo. Ni la herencia paterna ni esta generosa donación estarían sujetos al impuesto inglés de sucesiones. En todo caso, la publicación de las declaraciones de Cameron no aclara, según apunta la BBC, qué beneficios habría obtenido de otras acciones no relacionadas con el fondo offshore que dirigía su padre.
“Quiero ver todos los papeles”, reclamó ayer el líder de la oposición, el laborista Jeremy Corbyn, a una cadena televisiva. “Necesitamos saber todos los datos y necesitamos saber, antes que nada, por qué puso ese dinero en un paraíso fiscal y si manejó ese dinero
Las declaraciones revelan que el ‘premier’ recibió un regalo de su madre de 200.000 libras libres de tasas
antes o después de ser primer ministro. Eso es a lo que tiene que responder”, clamó. Corbyn defendió que había que estudiar la posibilidad de que ese regalo materno de 200.000 libras estuviera sujeto al impuesto de sucesión.