Garzón allana el camino para liderar IU en sustitución de Cayo Lara
El portavoz de IU en el Congreso, Alberto Garzón, salvó ayer en el consejo político de su partido los últimos obstáculos que había a su propuesta de reforma estatutaria, con lo que afronta la asamblea federal de junio con garantías para hacerse con el liderazgo de IU de forma muy holgada.
Una reforma cuya principal novedad es que la dirección será elegida por sufragio universal y no por el sistema de delegados, como hasta ahora, pero que también da luz verde a un consejo político más reducido (de 244 miembros a 150) y cuya composición será elegida en un 60 % por la asamblea federal y en un 40% por las federaciones.
Con estos cambios en los estatutos, Garzón afianza su liderazgo de cara a la asamblea de los días 4 y 5 de junio, que, en principio, mantiene las fechas, aunque no se descarta un posible adelanto, como defiende él.
En el consejo político de ayer, que podría ser el último antes de la asamblea, Cayo Lara, coordinador federal ya de retirada después de ocho años al frente, hizo un balance muy crítico de su último mandato, que fue apoyado por más del 62 por ciento de los asistentes.
Entre otras cosas reconoció que IU no ha sido capaz de gestionar la irrupción de Podemos en su mismo espacio político, permitiendo que su voz se impusiera a la de IU, y tampoco se ha cumplido el objetivo de la refundación.
En el turno de Alberto Garzón, este se centró sobre todo en el panorama político, con una legislatura en precario, e incidió en que un gobierno del PSOE, con miembros de Ciudadanos y aplicando sus políticas económicas, no tendrá “ni el apoyo ni la simpatía” de su formación porque sería “exactamente igual” que si continuara el PP.
En cualquier caso, el portavoz parlamentario aseguró que aunque la repetición de los comicios no es una buena baza, IU está preparada para enfrentarse de nuevo a las urnas.