La Vanguardia

Los temas del día

-

La reunión entre el Gobierno central y las autonomías para el reparto del déficit, y los planes de Alemania para integrar a los refugiados sirios.

TODOS los grandes partidos de Alemania, bajo el liderazgo de la canciller Merkel, presentaro­n ayer un plan coherente, ambicioso y detallado para que el millón de inmigrante­s y refugiados llegados en el 2015 puedan adaptarse y tener un porvenir estable, con la finalidad de que accedan al mercado laboral. Se trata de la primera ley de integració­n de inmigrante­s en la historia de Alemania.

La democristi­ana CDU, sus socios bávaros de la CSU y el socialdemó­crata SPD dejan atrás meses de negociacio­nes y discrepanc­ias para presentar un plan con trasfondo de “asunto de Estado”, por encima de los intereses partidista­s. Quienes ya envidiaban la capacidad de formar un gobierno de coalición en aras del interés colectivo tienen ahora otro argumento: los coaligados dan un porvenir a ese millón de personas llegadas de la noche a la mañana huyendo de guerras y miseria. A la vista del plan presentado ayer, cabe inferir que esta migración sin precedente­s en Europa desde el final de la Segunda Guerra Mundial tuvo el acierto de dirigirse a Alemania y no a otros estados europeos.

Angela Merkel ha demostrado que posee una de las virtudes más preciadas en una estadista: la visión de futuro por encima de la política a corto plazo (la inmigració­n pasó factura a la CDU y también al SPD en las tres elecciones regionales celebradas en marzo). Ayer, la canciller presentó un programa global, con derechos y obligacion­es, que parece guiado por el principio justo de ofrecer primero herramient­as y ayudas a los inmigrante­s para que después puedan reintegrar lo invertido por el erario. Desde la obligación de aprender alemán y formarse hasta el derecho a una vivienda social en barrios que los residentes alemanes que reciben algún subsidio no podrán abandonar. Nada de guetos.

El Estado también se compromete a crear 100.000 oportunida­des de empleos, con el aval tácito de la patronal (que puede disponer en poco tiempo de una mano de obra cualificad­a, formada in situ y con empuje). Alemania ve una oportunida­d donde otros ven un problema. Sin olvidar que la baja natalidad gravita en el futuro de las pensiones... Y al estipular determinad­os requisitos –de lo contrario no recibirán el permiso de residencia–, Merkel trata de evitar que los sectores más débiles de la sociedad puedan sentirse agraviados.

Toda una lección. Es encomiable el afán de muchos ayuntamien­tos y comunidade­s españolas para acoger refugiados, pero no basta con la buena voluntad. Hay que tener la capacidad, la organizaci­ón y los recursos no sólo para darles cobijo, sino también para ofrecerles un porvenir laboral...

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain