La explosión de una bomba en un autobús de Jerusalén causa 20 heridos
Por primera vez desde el inicio de la nueva ola de violencia palestina contra objetivos israelíes, que estalló hace cerca de siete meses, tuvo lugar un atentado en un autobús de Jerusalén –el número 12– provocando 20 heridos, entre ellos dos en estado grave.
El jefe de la policía de Jerusalén, Yoram Halevi, puso fin a varias horas de especulación al declarar que no hay duda de que se trata de un atentado terrorista y que fue el resultado de un artefacto explosivo colocado en la parte de atrás de un autobús.
Asi Aharoni, portavoz de la policía de Jerusalén, explicó que las fuerzas de seguridad, los artificieros y los investigadores de la policía intentan descubrir pistas que les permitan obtener más información sobre el atentado, por ejemplo buscando en los alrededores sospechosos que puedan estar vinculados al mismo. La explosión afectó a dos autobuses y un coche, y los analistas creen que se trata de una acción del grupo islamista Hamas, tras un aumento de tensión en la frontera entre Israel y Gaza.
Aharoni declaró que, según la información policial, Hamas no dejó en ningún momento de intentar llevar a cabo atentados, pero las fuerzas de seguridad lograron boicotearlos hasta el momento. Recientemente fueron encontrados dos laboratorios y arsenales de Hamas en Cisjordania. Las fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina cooperan con Israel en la lucha contra “grupos que ponen en peligro la seguridad nacional”, léase Hamas y la Yihad Islámica.
Horas antes del atentado del autobús, el ejército israelí descubrió un largo túnel subterráneo excavado desde el sur de Gaza con una profundidad de 40 metros y que entraba en territorio israelí.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, reveló que las fuerzas israelíes disponen ahora de medios tecnológicos que permiten detectar los túneles.