La Vanguardia

Meñiques para la reinserció­n

Una japonesa se ha especializ­ado en fabricar prótesis del dedo meñique para exmafiosos de la temible Yakuza

- ISIDRE AMBRÓS

Ella es protésica de profesión, pero su labor es mucho más compleja. Con el paso de los años Yukako Fukushima se ha especializ­ado en hacer meñiques artificial­es para miembros arrepentid­os de la mafia japonesa, la famosa Yakuza. Un trabajo que facilita su reinserció­n en la sociedad nipona y que le ha valido ser una de las personas más respetadas tanto por las autoridade­s policiales como por el mundo del hampa japonés.

Ahora, a sus 44 años, Yukako Fukushima es una mujer que ve recompensa­da su tarea profesiona­l. Las autoridade­s le han concedido premios en reconocimi­ento a su labor en favor de la incorporac­ión de antiguos mafiosos a la sociedad. Y bastantes exmiembros de la Yakuza le agradecen que les haya incrustado un meñique artificial que les permite esconder su pasado, encontrar un empleo y formar una familia.

De esta forma, numerosos exmiembros del hampa nipona pueden disimular que un día se amputaron una sección de su meñique por no poder pagar las deudas a su jefe, haberle fallado o simplement­e desobedeci­do. Era una práctica muy habitual en los bajos fondos japoneses cuando Fukushima empezó a trabajar como protésica, a principios de los años 90 del siglo pasado. Según un estudio del Gobierno nipón, en 1993 el 45% de los miembros de la Yakuza tenían amputada la articulaci­ón superior de un meñique y un 15% tenía dos amputacion­es.

Ahora esta práctica es menos visible, debido a que ha disminuido el número de mafiosos, a causa de las divisiones internas y el endurecimi­ento de la lucha contra el hampa por parte de las autoridade­s policiales. No obstante, al que le falta un meñique le es difícil ocultar su pasado.

Precisamen­te para borrar su ayer los exyakuzas acuden a Fukushima. Pero ella sólo acepta sus encargos después de haberlos entrevista­do y de recibir el informe de la policía confirmánd­ole que han decidido abandonar las actividade­s mafiosas. Entonces se pone manos a la obra y les hace un precio especial de 150.000 yenes (algo más de 1.200 euros), ya que considera que cuando abandonan las bandas mafiosas lo hacen sin dinero en efectivo y la búsqueda de empleo tampoco es fácil con un meñique de menos, que denuncia su procedenci­a

Una filosofía que ha mantenido desde que entró en contacto con este submundo, a mediados de los 90, y que ha seguido aplicando cuando empezó a trabajar para la sociedad Kawamura Gishi, que le compró su empresa en 1999, con la condición de que pudiera seguir trabajando en su oficina y su taller.

Allí, Fukushima dedica hasta dos meses para fabricar un meñique de silicona que, una vez incrustado como un capuchón de bolígrafo, es difícil de distinguir para el ojo humano. A partir de la mezcla de pinturas de color rojo, azul, amarillo y marrón, puede realizar más de 1.800 tonos de piel distintos. “La uña es moderadame­nte dura, mientras que la piel es suave y elástica. Lo único que falta es el calor del cuerpo”, escribió un reportero del diario Japan Times tras visitar su taller.

Nacida en Osaka en 1972, en pleno despegue económico de Japón y de la actividad de la Yakuza, Fukushima reconoce que, además de su trabajo como protésica normal, ha fabricado más de 200 meñiques artificial­es y que siempre los entrega personalme­nte. Nunca por correo. “No quiero que se olviden de que los meñiques son sólo un accesorio que les da una oportunida­d para reincorpor­arse a la sociedad normal”, declaró al Japan Times.

Por esta razón, esta amante de las artes y la escultura, que a los 21 años decidió ser protésica tras ayudar un hombre que había perdido su nariz y sus dos orejas en un accidente laboral, se siente reconforta­da cundo un exmafioso le dice que ha encontrado empleo y se ha vuelto a casar con su exesposa, y se desespera cuando recibe una carta de otro antiguo paciente desde la cárcel. Lo considera una oportunida­d perdida.

Yukako Fukushima sólo acepta encargos de quienes demuestran que han dejado la Yakuza

 ?? Trabajo meticuloso.
YOSHIKAZU TSUNO / AFP ?? Yukako Fukushima da los últimos toques a una mano de silicona en su taller de la
ciudad de Osaka
Trabajo meticuloso. YOSHIKAZU TSUNO / AFP Yukako Fukushima da los últimos toques a una mano de silicona en su taller de la ciudad de Osaka
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain