Portugal allana el camino para que CaixaBank tome el control de BPI
La entidad catalana lanza una opa sobre el banco luso a 1,113 euros por acción
CaixaBank concretó los detalles de la oferta pública de adquisición voluntaria (opa) sobre el banco BPI, tras romper el acuerdo con Isabel dos Santos, segunda accionista y propietaria del banco luso, con un 18,6% del capital. La entidad financiera presidida por Isidro Fainé, y cuyo consejero delegado es Gonzalo Gortázar, está dispuesta a pagar 1,113 euros por acción en metálico, lo que supone valorar el 100% de BPI en 1.622 millones de euros. Entre las condiciones que ha puesto sobre la mesa destacan tres: superar el 50% del capital; la eliminación de los blindajes sobre los derechos de voto (que están en el 20%) y recibir las autorizaciones pertinentes de los organismos regulatorios.
CaixaBank posee el 44,1% del capital del BPI (más del doble que la participación de la sociedad Santoro Finance, propiedad de Dos Santos), pero al existir límites en los derechos de voto, en la práctica la capacidad de control de la entidad financiera barcelonesa sobre la entidad es mínima.
Si se eliminan los blindajes, a CaixaBank le falta casi un 6% para tomar el control (50,01%). Esto significa que lo mínimo que tendría que desembolsar para tomar las riendas serían 96 millones de euros. Si todos los accionistas restantes optasen por vender y CaixaBank se hiciese con el 100% de la entidad (le faltaría un 55,9% en este caso) el desembolso ascendería a 906 millones. No obstante, existen escenarios intermedios, como alcanzar un 70% del capital, lo que significa pagar por el 25,9%, que le restaría 420 millones.
Respecto a la segunda condición, eliminar el límite de voto, el Gobierno portugués aprobó a finales de la semana pasada un decreto ley, que entraría en vigor el 1 de julio, para que las empresas supriman los blindajes y, por consiguiente, los bloqueos. Esto allanaría el camino. Queda por ver cómo se articula la nueva normativa y si la oposición política la recurre. En cualquier caso, BPI tendrá que aprobar sus modificaciones estatutarias en una próxima junta de accionistas.
La jugada se repite. CaixaBank ya lanzó el 17 de febrero del año pasado una opa similar por el 55,9% de BPI a 1,329 euros por acción, pero como la junta votó contra la eliminación estatutaria de voto, al final CaixaBank optó por
El Gobierno portugués aprueba un decreto para eliminar los blindajes empresariales
El desembolso puede oscilar entre 96 millones (50,1% del capital ) y 906 millones
retirar la oferta. El precio que ahora ofrece el banco catalán es un 16% inferior al propuesto hace poco más un año debido a que la valoración del sector bancario en la eurozona ha caído de media un 26% en los últimos meses.
La situación de BPI es también diferente. El Banco Central Europeo (BCE) le ha impuesto una multa diaria de unos 140.000 euros por el riesgo que conlleva su participación del 50,01% de Banco de Fomento de Angola (BFA) y consolidar esa participación en sus cuentas. El regulador europeo exige reducir su exposición en Angola y hasta que se alcance esa situación provisionar el 100%. El plazo para cumplir con ese requisito venció el pasado 10 de abril. Para paliar tal situación, CaixaBank ha solicitado al supervisor europeo un aplazamiento de dicha sanción hasta que se “encuentre una solución”. BPI tendría que vender, en una segunda fase, su división angoleña y reducir dicho porcentaje para que no consolide o fusionarla con otra entidad africana para diluir su participación. Se da la circunstancia que el 49,9% de BPI pertenece a la empresa de telecomunicaciones angoleña Unitel, donde también participa Isabel dos Santos.
El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, confía en que la opa salga adelante y calificó el precio de “justo”.