La Vanguardia

Rebelde con causa

DANIEL J. BERRIGAN (1921-2016) Activista en favor de la paz y poeta

- JOSÉ MARÍA PUIG DE LA BELLACASA

Fue un defensor de la desobedien­cia civil contra la guerra de Vietnam y las armas nucleares. A los dieciocho años entró en la Compañía de Jesús con un amigo de la infancia. Nació el 9 de mayo de 1921 en Virginia, Minnesota, el quinto de seis hermanos. Junto con un amigo de la adolescenc­ia leyó un escrito sobre el riguroso y exigente programa de formación de los jesuitas. No conocía a ninguno, pero después de entrar en esta orden religiosa diría que fue un acto de fe por ambas partes y recordaría con frecuencia que “no fue un mal pacto”. Daniel J. Berrigan emergió como intelectua­l de la “nueva izquierda”, articuland­o una perspectiv­a según la cual el racismo y la pobreza, el militarism­o y la codicia capitalist­a eran piezas interconec­tadas de un único gran problema: una sociedad injusta. Reconocido poeta, escribió más de cincuenta libros y opúsculos sobre las Escrituras, temas de espiritual­idad y oposición a la guerra, actitud que considerab­a que “no tenía vuelta atrás”. El también jesuita James Martin, director de America magazine ,leha descrito como “una de las figuras de nuestra época, un defensor de la justicia social y un incansable promotor de la paz”. Berrigan fue muy conocido por sus llamativas acciones de desobedien­cia civil e incitó a los católicos estadounid­enses a revisar su relación con la política y a rechazar el militarism­o.

Durante sus años de docente en New Jersey (St. Peter’s Prep en Jersey City) a finales de los años cuarenta asistió a unas sesiones de “clarificac­ión de las ideas” que se celebraban los viernes y en las que los oradores abordaban los temas candentes de la época y se debatían cuestiones de actualidad entre los jóvenes del movimiento católico, además de impartir sesiones y conferenci­as. Conoció también a Dorothy Day, de la cual diría un día que “me enseñó más que todos los teólogos”.

EE.UU. era un país desgarrado por la guerra de Vietnam y las distintas posturas sobre los derechos civiles. Daniel desafió a los católicos de su país a rechazar la guerra y las armas nucleares. Con su hermano Philip pasó a la acción quemando cientos de documentos de las listas de reclutamie­nto en Catonsvill­e, Maryland, el 17 de mayo de 1968, con ayuda de napalm de fabricació­n casera; fue sometido al consiguien­te proceso y estos acontecimi­entos estimularo­n una escalada de protestas en todo el país. Daniel J. Berrigan fue acusado y declarado culpable. Cuando llegó el momento de la sentencia, pasó a la clandestin­idad y eludió al FBI cuatro meses. Más adelante declararía: “Yo sabía que al final me detendrían, pero quería llamar la atención todo el tiempo posible sobre la guerra de Vietnam y sobre la orden de Nixon de intervenir militarmen­te en Camboya”. El FBI le detuvo por fin en agosto de 1970 y pasó 18 meses en la prisión federal de Danbury.

El 9 de septiembre de 1980, Daniel y Philip entraron en una planta de fabricació­n de misiles, donde golpearon diverso armamento nuclear (sin carga). Los dos hermanos no se arredraron ante las dificultad­es y acordaron mantener sus posturas. Tras un juicio que sirvió de plataforma de su mensaje antibélico, los Berrigan fueron declarados culpables de destruir propiedade­s del Gobierno y sentenciad­os a penas de prisión en la cárcel federal de Danbury, Connecticu­t. Sus rostros apareciero­n en la portada de la revista Time y la imagen de Daniel se difundió en una fotografía con las esposas puestas y haciendo el signo de la victoria con la mano derecha. Tras esta reclusión y las vicisitude­s que atravesaro­n, Philip se valió de tal material para escribir un poema, El juicio de los nueve de Catonsvill­e, incluido en una obra que se representó en un solo acto y se basaba en las transcripc­iones del proceso y en los “poemas de la prisión”.

A principios de los años cincuenta, Daniel fue a Francia, donde acabó sus años de formación para el sacerdocio. Conoció y se familiariz­ó con el movimiento de los “curas obreros”. Enseñó francés y filosofía en la Brooklyn Preparator­y School de 1954 a 1957. En 1957 ganó el prestigios­o Lamont Poetry Prize por su primer libro de poesía, Time without number, y enseñó Nuevo Testamento en Le Moyne College en Syracuse, Nueva York.

En 1963, Daniel embarcó en un viaje que le llevaría a Francia, Checoslova­quia, Hungría, Roma. Sudáfrica y la Unión Soviética. A su vuelta en 1964 creía firmemente que “la guerra en Vietnam sólo podía ir a peor”. Las cuestiones de la situación en Indochina y la guerra de Vietnam le influyeron profundame­nte y estimularo­n su espíritu crítico; cofundó con otros el Catholic Peace Fellowship y otros movimiento­s (como el Clergy and Laity Concerned about Vietnam) cuyos líderes eran Martin Luther King Jr., Richard John Neuhaus y Abraham Joshua Heschel. En febrero de 1968 voló a Hanoi con el historiado­r Howard Zinn y medió en la liberación de tres pilotos estadounid­enses capturados en la guerra.

Los últimos años de Daniel J. Berrigan estuvieron dedicados al estudio de la Biblia, la atención a la correspond­encia y las sesiones dedicadas al activismo por la paz. Publicó comentario­s que aunaban la reflexión pastoral con la inspiració­n poética. Mantuvo su actitud de protesta contra las guerras de su país en Afganistán e Iraq y contra la prisión de Guantánamo. Sus amigos le recuerdan como persona íntegra y defensora de la paz.

 ?? DAVE PICKOFF / AP ??
DAVE PICKOFF / AP

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain