Necesitan pareja
Este jueves, en el programa La tribu de Catalunya Ràdio reflexionaban, de manera divertida, sobre cómo tenía que ser la pareja de Elsa de Frozen. Sí, hablo del personaje de dibujos animados. Puesto que no acabó con un prometido en la primera película, la pregunta es sobre si esta, en la segunda, tiene que ser un hombre o una mujer. Hay para todos los gustos y la polémica ha crecido porque, en este tema –y en muchos otros–, algunos expresan la disensión de manera muy desagradable y ofensiva. Me ahorraré los detalles, pero vale la pena revisar las opiniones para recoger cuánto nos jugamos en hechos que pueden parecer, a primera vista, triviales.
En otro plano de realidad, el líder de Corea del Norte busca marido para su hermana pequeña, que ya tiene 28 años. Y, aunque no es modelo de nada, o de nada que sea bueno imitar, no deja de ser especialmente grotesca la manera, según ha publicado el diario The Sun, en que ha planteado la búsqueda: un reality televisivo.
Y no muy lejos de allí, un político chino de alto rango ha expresado públicamente en una entrevista los problemas que conllevará que la primera presidenta de Taiwán, Tsai Ingwen, sea soltera; argumenta que esta circunstancia afectará a la radicalidad de su política.
Parece el fervor de la primavera, pero de hecho es el reflejo de una idea muy arraigada en el subconsciente del machismo: una mujer por ella sola no va a ninguna parte o no puede ir a ninguna parte. A diferencia, claro, de los hombres. Pero si tenemos demasiados ejemplos de lo contrario –conocidos y publicitados– se derrumba el mito.
Casos de mujeres que salen adelante solas, en cualquier ámbito, siempre han existido y todavía más de los que era razonable esperar atendidas las cortapisas, de todo tipo y niveles de gravedad, que se han puesto para impedir este tipo de autonomía.
Y, especialmente, ¿dónde queda todo lo que se ha dicho y se sigue diciendo sobre la no capacidad, la incapacidad o la debilidad de las mujeres? Y lo que todavía es más grave, ¿si las mujeres vamos directamente hacia una carrera personal solas, de manera mayoritaria, qué pasará con la familia y los hijos? ¿Qué pasará con el mundo? Lisa y llanamente, que necesariamente tendrá que cambiar de modo radical; y eso aterroriza a muchos más de los que lo quieren admitir y a muchos más de los que quieren que nada cambie.