“Tenemos pruebas contra Google”
Margrethe Vestager, comisaria europea de Competencia
NUEVA INVESTIGACIÓN A GOOGLE “Quiere extender su dominio en las búsquedas a los móviles y usa Android para ello”
INSTINTOS PRIMARIOS “Los casos siempre tienen que ver con algo bastante banal: la codicia y el miedo”
DESPRECIO A LA COMISIÓN “Las críticas de Google no me afectan, para nosotros lo que importa es el caso”
Después de años negociando coaliciones y batallando para sacar adelante leyes en el Parlamento de Dinamarca, Margrethe Vestager (1968) lo admite: “Disfruto mucho haciendo este trabajo”. Ostenta la cartera de Competencia en la Comisión Europea, la más poderosa. Puede hacer y deshacer fusiones, reclamar la devolución de ayudas públicas y condicionar la forma en que las empresas operan en Europa para que todas compitan en pie de igualdad. Pero tiene muy presente que su poder alcanza “hasta el día en que me equivoque” y el Tribunal de Justicia la corrija. Es lo que quiere evitar a toda costa
el día que dé el paso para castigar la forma de operar de Google en Europa, el caso más potente que tiene entre manos. Bajo su liderazgo, la Comisión ha presentado cargos formales contra la compañía por dos acusaciones diferentes. Niega que esté a punto de multarla con 3.000 millones, como afirma un diario británico, pero recalca que la investigación avanza a buen ritmo y desea blindar bien el caso. Vestager se acerca personalmente a la sala de espera para llevar a la periodista hasta su despacho, un espacio que destila sencillez nórdica y sofisticación, donde aborda la entrevista sin papeles, asesores o portavoces.
Cuando llegó a Competencia pidió un tiempo para estudiar la cartera. Poco después dio un giro radical a la gestión de su antecesor con el caso Google. Abandonó los intentos de llegar a un acuerdo amistoso y troceó el expediente. Las cosas que se habían hecho hasta entonces no habían resuelto el caso. Pensé que mi obligación era encontrar otra forma de resolverlo, siendo quizás más desafiante. Creo que tenemos pruebas del caso y quiero demostrar que el derecho de la Competencia es útil.
¿Está a punto de cerrar el caso sobre el comparador de precios?
En teoría debería ser fácil dar una fecha viendo el ritmo al que avanzamos pero luego siempre ocurre algo, te ponen datos sobre la mesa que también has de tener en cuenta y esto hace muy difícil hacer cualquier pronóstico. Y aunque fuera fácil hacerlo, no se lo diría a la prensa (ríe).
¿Están ya fijando la multa? No, no, en absoluto.
¿Han llegado nuevos datos que pueden alargar el expediente? Cuando Google respondió a nuestro pliego de cargos, nos enviaron muchos datos para asegurarse de que tenemos en cuenta todo, y eso significa que hemos tenido que manejar toneladas de información.
¿Es una estrategia deliberada de Google, saturarlos? Puede serlo o no, pero hemos logrado gestionarlo. Estamos investigando todo a fondo, viendo si en algún aspecto pueden tener razón y necesitamos más datos. Es nuestra obligación. Si no somos lo suficientemente exhaustivos y el caso llega al Tribunal de Justicia y perdemos, sería muy dañino.Y en cualquier caso, porque hayan violando un artículo u otro del Tratado no dejan de tener pleno derecho a la defensa.
¿El caso sentará precedente? El primero caso en que dijimos que Google usa su posición dominante en las búsquedas por internet para promocionarse en otros sectores fue el del comparador de precios. Nos va a dar claves sobre los métodos y conductas de Google en búsquedas locales, viajes, mapas y otros servicios donde funciona con el mismo mecanismo. No es que resolviendo uno los resolvamos todos pero sabremos muchas mas cosas.
En abril presentó otra acusación formal por su sistema operativo para móviles, Android. Está relacionado. Google quiere para ser tan dominante en las búsquedas móviles como lo son en los ordenadores de sobremesa y hay una estrategia para conseguirlo usando Android. El problema no es el sistema operativo en sí sino cómo lo usa. El caso tiene una naturaleza diferente, pero hay una relación entre ellos, son primos hermanos. Se trata de ser dominante en un sector clave. Es en las tabletas y móviles donde hacemos y se harán la mayoría de las búsquedas y otras funciones. Es muy importante quién tiene acceso a tu teléfono. Si no hay opciones de introducir algo en él, es muy complicado presentar algo nuevo al cliente. Si usas Android, necesitas instalar Play Store para bajarte apps, pero para eso debes bajarte también el buscador de Google y el navegador Chrome, lo que no anima a buscar otras apps.
Recuerda mucho a lo que Microsoft hizo con Windows Media Player y acabó pagando caro. Hay similitudes pero el mundo ha cambiado mucho. Algunos fundamentos son lo mismo, sí, pero el problema en los casos antimonopolio es que no porque resuelvas uno puedes dar por resueltos los demás.
También investiga Ad Words, su servicio de publicidad de Google. ¿Presentará cargos en breve? Aquí lo que vemos que una vez que entras en ese universo es muy difícil salir, irte con tu campaña a otro competidor.No puedo dar ningún plazo. Todos estos casos tienen una alta prioridad pero no sé cuándo los concluiremos. Todos responden a algo muy profundo del Derecho de la Competencia: como empresa, puedes ser grande, tener éxito y ser dominante pero no puedes abusar de esa posición.
¿Está Google siendo ‘malo’, en contra de su lema, Don’t be evil? No me corresponde hacer juicios morales. Creo que en general se trata de algo bastante banal: la codicia, querer conseguir algo de forma más rápida en lugar de por los propios méritos y en justa competencia. Tiene que ver también con el miedo a perder terreno o a no estar en próximos mercados. Nuestra tarea aquí es asegurarnos de que los ciudadanos no sufren por esto.
Matt Brittin (Google) acusa a sus funcionarios de estar mal informados y defender el pasado en lugar del futuro. ¿Está cayendo en la arrogancia y el error de Microsoft de despreciar a la Comisión? Bah, la gente dice todo tipo de cosas. Para nosotros no es una cuestión de retórica ni relaciones públicas. Lo que nos importa es el caso en sí, los hechos y la interpretación de las pruebas. No me afecta lo que digan. Es nuestro trabajo y seremos tan exhaustivos como haga falta.