‘Pet sounds”, una obra maestra
El productor y autor de la mayoría de los temas de los Beach Boys llega a Barcelona acompañado por Al Jardine, en el 50.º aniversario de la publicación del mítico álbum
Pet sounds (1966), el undécimo álbum de estudio de los Beach Boys, no fue recibido en su día con el éxito que obtuvieron los discos precedentes del grupo californiano. Demasiado ambicioso y sofisticado, se salía del surf-pop que los hizo célebres. Con el tiempo fue adquiriendo el status de obra maestra del que goza hoy en día, y está considerado, más que un disco del grupo, el trabajo exclusivo del genial Brian Wilson, productor y autor de la mayoría de su música. Lleno de elaborados arreglos orquestales y capas de armonías vocales, estaba además trufado de inusuales efectos de sonido que incluían ruidos de objetos y el uso del theremin por primera vez en una grabación pop. Su influencia ha sido enorme y, según reconoció Paul McCart- ney, fue determinante en la realización del Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band. El ex Beatles también afirma que la canción God only knows es su favorita de todos los tiempos.
Considerado el primer disco conceptual de la historia del rock, contiene canciones introspectivas, como You still believe in me, relatos de su experiencia con el LSD, I know there’s an answer, o temas autobiográficos del calibre de I just wasn’t made for these times, que habla de la alienación social. Con él se inauguró el art-rock y la era psicodélica mezclando elementos tomados del pop, del jazz, de lo exótico y lo vanguardista, en un sofisticado muro de sonido que también se puede considerar precursor de la era progresiva. De hecho Brian Wilson afirma que Pet sounds fue una interpretación de los métodos de grabación que Phil Spector patentó con su Wall of sound. También reconoce que fue determinante el Rubber soul (1965) de los Beatles, un álbum cohesionado que rompió el esquema de singles protagonistas y temas de relleno y que supuso un reto y una inspiración para él.
Paradójicamente esta evolución en el sonido de los Beach Boys significó el enfrentamiento con el resto del grupo, que no veían nada claro la nueva orientación, demasiado futurista y experimental, cuya complejidad estaba en las antípodas de la inmediatez de las canciones sobre coches y chicas que los habían hecho célebres. Muchos años después el álbum al completo fue revivido en una serie de conciertos plasmados en Brian Wilson presents Pet Sounds live (2002), grabado en el Royal Albert Hall de Londres. Ahora, coincidiendo con el 50 aniversario de su publicación, vuelve acompañado por Al Jardine y varios de los músicos que colaboraron en el rescate del nuevo milenio en lo que supone un acontecimiento histórico.