‘Top Gear’ contra ‘Top Gear’
La nueva edición del programa de coches más popular del mundo arranca con poca audiencia durante la emisión y críticas al nuevo presentador
ALBERT MOLINS RENTER
Tras casi 40 años en antena, Top Gear, el programa dedicado al mundo del motor y uno de los mayores éxitos de audiencia y ventas de la BBC, se enfrenta al reto de mantener sus cifras después de que Jeremy Clarkson, uno de sus presentadores estrella –y el responsable de convertirlo en un éxito durante más de una década–, viera como la cadena no le renovaba el contrato en marzo del 2015, por agredir a uno de los productores del programa. La primera emices sión del programa en la BBC 2 data de 1977. Era entonces un espacio de motor absolutamente convencional. Y siguió siéndolo incluso cuando en 1988 se incorporó Clarkson como presentador, hasta el punto que en el 2001 la BBC lo canceló. Pero fue durante poco tiempo. Al año siguiente el propio Jeremy Clarkson y el productor Andy Wilman presentaron a la cadena pública británica un formato absolutamente renovado y rompedor del programa, que lo convirtió en mucho más que un programa de motor y que consiguió agradar incluso a los que no nos gustan ni los coches de juguete. Fue enton- cuando se incorporaron como copresentadores Richard Hammond (alias Hámster) y James May (alias capitán Pisahuevos, captain Slow en inglés) y Top Gear se convirtió no en un programa sino en un show con los coches y la gasolina como excusa, lleno de sentido del humor, irreverencia y no poca controversia y polémica.
Y también en un éxito comercial. El programa genera para la cadena británica 68 millones de euros en ventas en todo el mundo y su audiencia global es de 350 millones de personas. En España, el programa lo emite Discovery Channel, los jueves a las 21.30h. Además, se ha convertido en una franquicia con programas con el mismo nombre y formato en Estados Unidos, Francia y Australia. Incluso la cadena privada Channel 5 puso en circulación en el 2002 Fifth Gear, un programa cuya versión actual parece estar algo más que inspirada en la de la BBC y cuyos presentadores lo fueron también de la primera época de Top Gear. Actualmente lo emite la ITV.
Todo esto hasta que a Jeremy Clarkson le patinó el embrague, la BBC lo despidió –a pesar de que más de un millón de personas pidieron a la BBC su readmisión– y
Hammond y May decidieron irse con su compañero.
Ante la disyuntiva de matar a la gallina de los huevos de oro o de buscar otros presentadores, la BBC optó por lo segundo y formó un nuevo y extendido equipo de presentadores. Los elegidos fueron el presentador estrella de Radio 2 Chris Evans, el actor Matt LeBlanc (el Joey de Friends), la piloto alemana Sabine Schmitz, el expiloto de fórmula 1 Eddie Jordan, el periodista Rory Reid y el youtuber Chris Harris. Y como no, el imprescindible y silencioso The Stig, el piloto encargado de probar los coches más potentes.
Después de un descanso de 11 meses, el programa se volvió a emitir de nuevo el pasado domingo 29 de mayo y no ha recibido ni buenas críticas ni buenos índices de audiencia durante la emisión en ninguna de las dos entregas que se han emitido hasta la fecha, a pesar de que Eddie Jordan se había mostrado convencido en la presentación de que la nueva versión iba a ser mejor que la anterior. Incluso hay fans que han pedido que Chris Evans sea sustituido por el piloto Jenson Button.
La primera entrega de esta nueva etapa lo vieron en directo 4,3 millones de espectadores, en el peor inicio de temporada de Top
Gear en más de una década. Una vez contabilizados los espectadores que grabaron el programa para verlo después y aquellos que lo han ido viendo a lo largo de la semana en internet, la cifra total anunciada por la BBC este lunes se ha situado cerca de los 8 millones de espectadores, en lo que la BBC ha calificado como “los mejores datos consolidados del programa desde el 2010”. Pero las luces rojas de alarma se han encendido después de conocerse los datos del segundo episodio, 2,8 millones de espectadores. Evans, que el lunes sacó pecho y arreció contra sus críticos, se ha mostrado convencido de que internet volverá a obrar el milagro y que Top Gear derrotará a Top
Gear.