Borja de Riquer
HISTORIADOR
El historiador Borja de Riquer acaba de publicar Cambó en Argentina (Edhasa), una extensa y rigurosa investigación sobre la empresa Chade, cuya actuación en Argentina cuestiona el papel del político Francesc Cambó.
Cambó en Argentina. Negocios y corrupción política, a cargo de Borja de Riquer, no es una historia demasiado edificante. La investigación sobre la Compañía Hispanoamericana de Electricidad (Chade), de la que Cambó era presidente del consejo de dirección y del consejo de administración, revela un increíble entramado de corrupciones y sobornos, principalmente en Argentina donde actuaba pero también a nivel internacional.
Ya no nos sorprende nada, vino a decir Daniel Fernández, editor de Edhasa, que ha publicado estas 500 páginas, fruto de cuatro años de trabajo. No es sólo un libro de historia económica basado en contabilidades y estadísticas, señaló el historiador Jordi Maluquer de Motes, durante su presentación ayer en la librería Alibrí, de Barcelona.
Borja de Riquer ha podido acceder a anotaciones personales, correspondencia, informes reservados y archivos secretos recién desclasificados. De todo eso emerge que Chade fue una compañía que monopolizó durante tres décadas el sector eléctrico en Argentina. “Entre los años veinte y mediados de los cincuenta la compañía estuvo inmersa constantemente en problemas, escándalos y comisiones de investigación pero ganó todas las batallas”, dijo el historiador. Y la razón hay que buscarla en suculentos sobornos a políticos de todos los colores, periodistas y empresarios. El resultado fue que Chade se convirtió en la empresa que aportaba más divisas a España. La que llegó a cotizar un 1.000% en la Bolsa de Nueva York. Sólo Cambó y el vicepresidente Heineman llegaron a embolsarse el equivalente a 15-20 millones de euros al año. Otros accionistas y miembros del consejo de administración como el también vicepresidente Joan Ventosa Calvell, los tres hermanos Urquijo, José Garí, el marqués de Foronda o el duque de Alba fueron también beneficiarios. ¡Nombres ilustres!
Ante un auditorio estupefacto y con caras conocidas (Joaquim Nadal, Oriol Bohigas, Josep M. Vallès, Josep M. Muñoz, Viver Pi Sunyer...), Borja de Riquer argumentó con algunas “historietas”. Como las distintas acciones de ingeniería financiera para eludir las nacionalizaciones. Al finalizar la I guerra mundial convirtiendo una empresa de origen alemán en otra española; en 1936 poniéndola bajo control argentino y convenciendo a Franco de que era una imposición del gobierno de Argentina; y en 1940, ante el inicio de otra guerra, llevándola al paraíso fiscal de Panamá. “El pánico ante una posible victoria alemana provocó en 1940 una huida de capitales europeos hacia América. Cambó se llevó a Estados Unidos y Argentina tres millones de dólares, que al cambio actual son unos 300 millones de euros”, apostilló el autor. En 1943 un golpe de Estado supuso la incautación de la compañía y la creación de una comisión de investigación. Parecía el final, pero los maletines para pagar la futura campaña electoral del coronel Perón y su victoria frenaron la investigación. Conclusión del historiador: “Cambó y sus biógrafos ocultaron esta historia. Cambó es un personaje poliédrico, más contradictorio de lo que pensaba, que para conservar su fortuna subordinó otros valores”.
Otro mito que se desmorona.