Alemania reacciona “con enorme pesar” y llama a la unidad de los 27
Merkel defiende el proyecto europeo y busca evitar que cunda el ejemplo británico
“Con enorme pesar”, así dijo Merkel. La decepción e inquietud con que el Gobierno alemán ha acogido el resultado del referéndum británico se tiñó ayer de un tono casi melancólico, inmediatamente despachado para ir al grano y dejar claro que, pese al adiós del Reino Unido, el proyecto europeo continúa, y Alemania está dispuesta a liderarlo. En una comparecencia tras una reunión con ministros y líderes de los partidos políticos con representación parlamentaria, la canciller democristiana, Angela Merkel, lamentó en nombre de todos “con enorme pesar la decisión de la mayoría del pueblo británico”, y la calificó de “punto de inflexión para el proceso de unificación europea”.
Pero llamó entonces a no extraer “conclusiones rápidas y simples” del Brexit que puedan generar más división, pues hay temor, tanto en Bruselas como en los grandes países de la UE, a que cunda el ejemplo británico entre otros países comunitarios con gobiernos poco europeístas. La canciller arguyó que el impacto del Brexit en el resto de Europa “dependerá de manera crucial del modo en que en esta situación nosotros, los otros 27 estados miembros de la UE, nos mostremos capaces de no extraer conclusiones rápidas y simples del referéndum en Gran Bretaña, que dividirían aún más a Europa”.
Muy seria en todo momento, Angela Merkel afirmó que Alemania tiene un “interés especial” y una “responsabilidad especial” en que la unidad europea sea alcanzada con éxito. Anunció entonces la invitación formulada al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk; al presidente francés, François Hollande; y al primer ministro italiano, Matteo Renzi, para reunirse con ella en Berlín el próximo lunes y “analizar la situación con calma y moderación”. Los cuatro mantendrán así conversaciones previas a la cumbre europea prevista para los días 28 y 29, que se verá sacudida por los coletazos del referéndum británico. Además, el Bundestag albergará el martes una sesión extraordinaria para debatir el nuevo escenario surgido del voto británico.
Durante la jornada de ayer se sucedieron tomas de postura, concordantes en lo esencial pero cada una con sus matices, de miembros del Gobierno de coalición de democristianos y socialdemócratas. El ministro de Exteriores, el socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier, fue el primero en deplorar el resultado del referéndum. De buena mañana tuiteó que era “un día triste para Europa y para el Reino Unido”. Steinmeier recibe hoy en Berlín a sus homólogos de Francia, Italia, Bélgica, Holanda y Luxemburgo (es decir, los otros cinco países fundadores con Alemania de lo que luego sería la UE), en un encuentro que es tradicional entre los fundadores, pero que adquiere ahora un simbolismo especial.
Varios otros socialdemócratas del SPD se mostraron desolados, y al tiempo demandaron firmeza. En un comunicado, el ministro de Justicia, Heiko Maas, tildó el día de ayer de “viernes negro para Europa”, y afirmó que “ahora el Brexit debe ser implementado con rapidez”. El ministro de Economía y vicecanciller, Sigmar Gabriel, líder del SPD, abogó por más inversiones para combatir el desempleo en el sur de Europa, y también como forma de luchar contra el euroescepticismo. “Hubiera querido otro resultado, pero ahora hay que mirar hacia adelante”, señaló Gabriel.
En un comunicado matinal, el titular de Finanzas, Wolfgang Schäuble, lamentó la decisión británica de optar por el Brexit, pero añadió que “ahora es preciso mirar adelante y solventar esta situación”, y aseguró que Europa se mantendrá unida. Hace sólo dos semanas, Schäuble había recordado a los partidarios del Brexit que “dentro es dentro, y fuera es fuera”, en referencia al mercado único comunitario. Schäuble mantuvo ayer tarde una conferencia telefónica con sus homólogos y con los presidentes de los bancos centrales del resto del G-7 (Estados Unidos, Japón, Canadá, Francia, Italia y el Reino Unido).
La propia Merkel dijo que negociará los términos de la relación de Alemania con el Reino Unido, “teniendo en cuenta los intereses de los ciudadanos y las empresas alemanes”. Pero subrayó también que, mientras se implementan los mecanismos de salida de un país previstos en las leyes europeas, “todos los derechos y obligaciones” tanto del Reino Unido como de la UE en su conjunto siguen vigentes. Bruselas apremia para que el decidido Brexit no se demore, pero ahora el Reino Unido parece no tener prisa.
La nota discordante llegó del partido de derecha populista Alternativa para Alemania (AfD), exultante por el desenlace británico.
La canciller admite que el sí al ‘Brexit’ es “un punto de inflexión para el proceso de unificación europeo”