Iglesias teme un efecto ‘Brexit’ entre los indecisos
El líder ve ataques “autoritarios” a raíz del portazo británico
Pablo Iglesias asegura a todo aquel que le pregunte que, en su opinión, el Brexit no incidirá en las elecciones del domingo. Pero, de hecho, en Podemos temen que los llamamientos del resto de candidatos a optar por “lo seguro” y dejarse de “aventuras” tras el portazo británico a la UE puedan hacer mella entre una parte de los indecisos y los disuadan de votar morado.
Ese riesgo “existe”, admitieron a este diario ayer fuentes cercanas a Iglesias. “No sabemos cómo nos afectará, pero seguro que no nos ha venido bien”, añadieron.
Lo cierto es que el secretario general de Podemos dedicó gran parte de la jornada final de campaña a salir al paso de la lluvia de ataques que le sobrevino a raíz del Brexit.
Las acometidas contra Iglesias fueron in crescendo..., lo mismo que el tono de sus contraataques. Para empezar, el presidente Mariano Rajoy, en alusión que cabía entender dirigida a Podemos, dijo en su declaración institucional que lo esencial ahora es “la estabilidad” y que no es momento para “añadir incertidumbres”. Otros miembros del Gobierno, como el ministro José Manuel GarcíaMargallo y la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría se expresaron en parecidos términos y advirtieron contra los “populismos”. A todo lo cual Iglesias replicó juzgando “poco elegante” que los miembros del Ejecutivo en funciones intentaran “arrimar el ascua a su sardina y aprovechar el Brexit para ganar un puñado de votos”. Hay que actuar “con altura de Estado”, opuso.
Tanto desde el PP como desde el PSOE y Ciudadanos se hicieron vinculaciones más o menos directas entre la desastrosa consulta británica y los planes de referéndum en Catalunya que Podemos apoya. Iglesias salió entonces en tromba contra lo que consideró “defensas del autoritarismo y el totalitarismo” . “Es terrible –añadió– que alguien diga que la democracia es un peligro” y utilice la crisis generada por el Brexit para arremeter contra todo “referéndum secesionista”, como de manera más clara había hecho Albert Rivera. Porque, por esa regla de tres –razonó el líder de Podemos–, la votación en el Reino Unido “puede llevar a algunos a proponer que se supriman las elecciones” so pretexto de que tal vez generen “inestabilidad” al conducir a un cambio de gobierno y de políticas. “No tiremos el niño con el agua sucia”, dijo. Porque el problema “no es que los ciudadanos voten” sino las razones por las que esos ciudadanos quieren desengancharse de un proyecto común, agregó.
Al final del día, que terminó con un triunfalista pero agridulce cierre de campaña codo a codo con el líder de IU, Alberto Garzón, el candidato de Unidos Podemos no podía cabalmente sostener que el Brexit había resultado irrelevante para el proceso electoral. Una cita con las urnas en la que él sigue confiando en obtener un gran resultado y superar al PSOE.
“No tiremos al niño con el agua sucia”, dice Iglesias frente al uso del ‘Brexit’ como arma contra los referéndums