Rajoy incluye esta vez en la negociación a ERC y CDC
El presidente empezará por ofrecer al PSOE un gobierno estable y reformas Los independentistas fueron relegados después del 20-D
Esquerra Republicana de Catalunya y Convergència Democràtica de Catalunya, que en las anteriores negociaciones para formar gobierno tras el 20-D quedaron relegadas a un segundo plano, serán tenidas en cuenta en la negociación para la formación del nuevo ejecutivo.
De estas conversaciones ha tomado el mando el propio presidente en funciones, quien desea que sean serias, rigurosas y discretas. Rajoy anunció a su vuelta el jueves del Consejo Europeo que hablaría con los partidos y ahora fuentes del Gobierno precisan que en esa lista figurarán también las dos fuerzas independentistas catalanas, pero eso no quiere decir que vaya a haber negociación con ellos aunque Rajoy no lo descarta. Todo dependerá de la predisposición de ambos para dialogar y para negociar.
Rajoy, según las fuentes consultadas, quiere hablar con todos aquellos partidos que vayan a tener grupo parlamentario en la próxima legislatura, y CDC aspira a ello, aunque el porcentaje obtenido pueda causarle algunos problemas. Por eso, el único partido que podría quedar fuera de esa ronda de contactos sería Bildu. Las fuentes consultadas creen que el presidente del Gobierno no tiene mucho que hablar con este partido, que ha obtenido dos escaños que se incorporarán al grupo mixto.
Pero si se producen esas conversaciones o no, y cuándo, poco se sabrá. Mariano Rajoy ha impuesto la ley del silencio a sus colaboradores y ha pedido discreción a sus interlocutores. El presidente del Gobierno está convencido de que uno de los principales escollos que hubo en diciembre para que los acuerdos llegaran a buen puerto fue “radiarlo todo”, de forma que de manera inmediata se producían interferencias en la negociación que la dificultaban cuando no la hacían imposible.
Rajoy quiere huir ahora de un escenario de “ruedas de prensa permanente” y de “teatrillo” en lo que a su juicio se convirtieron las negociaciones de diciembre.
Tras el anuncio del jueves, cuando desde el palacio de la Moncloa sólo se informó de la conversación telefónica que Mariano Rajoy había mantenido con el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, fue la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, la encargada de poner las cartas encima de la mesa y advertir que la discreción será lo que impere. La opinión pública, subrayó Santamaría, conocerá con todo lujo de detalles los acuerdos que se alcancen, cuando estos sean una realidad.
La vicepresidenta sí explicó cuál es la intención de Mariano Rajoy y a qué dedica sus esfuerzos, aunque no se conozca el orden de sus interlocutores y cuántos son estos. Con una advertencia, las negociaciones las llevará el propio Rajoy “muy de su mano”.
El objetivo con estas conversaciones, explicó la vicepresidenta, es que el gobierno esté constituido cuanto antes, que sea un gobierno estable y que esté presidido por él mismo, que ha sido el líder del partido más votado. Las conversaciones están también dirigidas, dijo, a que ese gobierno pueda trabajar dentro del marco de la Constitución, y con la estabilidad que la situación requiere.
Por eso el Gobierno no considera la mejor fórmula la planteada por el líder de Ciudadanos, consistente en abordar un acuerdo para dos años, y que transcurridos estos, el presidente investido tenga que someterse a una cuestión de confianza. A juicio del Ejecutivo, con ese horizonte temporal el gobierno no tendría la estabilidad que requiere. Mariano Rajoy pretende alcanzar un acuerdo para cuatro años y con los asuntos a abordar muy claros.
La única pista que volvió a dar la vicepresidenta del Gobierno fue sobre los asuntos sobre los que Mariano Rajoy quiere llegar a acuerdos. Citó la competitividad de la economía, la creación de empleo, la educación y el fortalecimiento institucional, que son básicamente los que Rajoy planteó en febrero pasado con los cinco acuerdos de legislatura.
Rajoy lo tiene muy claro, y Sáenz de Santamaría fue muy gráfica sobre la forma en la que el presidente del Gobierno abordará la situación: “Las casas se empiezan a construir por los cimientos” y se hace “con el rigor y la seriedad que le ha caracterizado”, para ir dando pasos poco a poco, en vez de dar pasos en falso que malogren los acuerdos.
CONTACTOS Rajoy hablará por teléfono con todos y después se reunirá según la disposición
RESULTADOS Santamaría asegura que se informará con todo detalle cuando haya acuerdos
FÓRMULA Rajoy insistirá en la fórmula de un gobierno estable, para cuatro años y con reformas