Los riesgos de que los niños sigan una dieta vegana
La noticia de que un niño que seguía una dieta “presuntamente” vegana ha sido ingresado en la UCI por falta de vitamina B12 es, además de triste, un elemento que invita a la reflexión. Es cierto que estos casos son infrecuentes y que se puede comer de forma equilibrada con una dieta vegana, claro que sí, pero no es fácil. La dieta vegana sólo incluye alimentos de origen vegetal y ha de estar muy buen diseñada y complementada para que sea sana. Evidentemente aquí ya entra la libertad de cada uno y su propia sensibilidad. Y es cierto que es triste e incluso poco sostenible tener que sacrificar animales. Se puede vivir sin carne ni pescado ni huevos ni lácteos, pero es más complicado. Requiere conocimientos y si es el caso de un niño, un seguimiento pediátrico exhaustivo. Recordemos que cuando la pauta dietética es de este tipo no es infrecuente que haya carencias de aminoácidos esenciales, hierro, calcio y vitaminas, especialmente la B12. Todas estas carencias son prácticamente inexistentes en casos de dietas vegetarianas que sí admiten huevos y lácteos y que son más equilibradas. Comer como uno quiera está muy bien, pero en el caso de los niños, ¿no es más inteligente darles la dieta que es más claramente completa? Cuando sean mayores de edad, ya elegirán la suya.