El ‘rating’ solidario
Diego Della Valle cree que en el futuro la solidaridad determinará el éxito empresarial porque los jóvenes la valorarán al comprar
Diego Della Valle recibió a La Vanguardia en su suite de un hotel sobre la plaza de España, con una vista espectacular sobre Roma. Su empresa, Tod’s, es sinónimo del lujo made in Italy, pero a él le gusta tocar con los pies en el suelo y respetar la dignidad de la gente modesta, sobre todo de sus empleados. “Nací y vivo en un pueblo de provincias”, recordó durante la conversación. Es allí, en Casette d’Ete, cerca de Ancona, en la región de Las Marcas, donde sigue teniendo Tod’s su cuartel general, en un complejo de extraordinaria belleza que semeja un museo.
La restauración del Coliseo es, para Della Valle, mucho más que una metáfora del renacimiento de una Roma en crisis. Su horizonte es toda Italia. El empresario anduvo con tiento a la hora de hablar de la nueva alcaldesa, Virginia Raggi, del Movimiento 5 Estrellas, el partido de Beppe Grillo. “Ahora empiezan –comentó–. Veamos cómo trabajan. No hay que tener prejuicios. Esperemos que lo hagan bien. Roma lo necesita. Y también lo necesita la credibilidad de Italia”.
El objetivo del dueño de Tod’s con el Coliseo es servir de ejemplo y animar a otros empresarios a dejarse de retóricas y arremangarse. “Nuestra idea era hacer una operación que tuviera un gran valor social y un valor comercial absolutamente cero, porque no es bueno mezclar las dos cosas”, explicó. Por eso aceptó un patrocinio que no implica publicidad directa. “Debemos empezar a hablar de qué podemos hacer por el país, como decía Kennedy”, agregó.
Della Valle está persuadido de que los empresarios, cada vez más, tendrán que combinar dos factores: competitividad y solidaridad. “En el futuro la solidaridad será uno de los ingredientes que determinarán el éxito de un empresario –enfatizó–. No sólo será importante qué has hecho, qué dimensión han conseguido, cuántas personas empleas, cuánto dinero ganas. Lo decisivo será cuánto de todo eso revierte de manera solidaria en los demás. Estoy seguro de que los jóvenes de hoy lo tendrán en cuenta cuando compren el producto. Verán si las compañías tienen un rating solidario justo o no, y en virtud de eso comprarán el producto de unas o de otras”.
A lo largo de la conversación, Della Valle mostró su inquietud por el alto desempleo de los jóvenes. Este problema le obsesiona. Piensa que hay que esforzarse por crear trabajo para los jóvenes para “darles seguridad y convencerles de que no todo va mal”. Considera un drama social que los jóvenes no hallen empleo después de años de formación y de sacrificio de sus familias por darles estudios. También es muy reacio a los ajustes de plantilla para mejorar la situación de las empresas. “Para mí eso debería ser siempre el último recurso, porque significa quitar el sostén económico a una familia –subrayó el presidente de Tod’s–. Debemos entrar en la lógica de que el trabajo es sagrado”.
Della Valle no escatimó opiniones sobre temas de actualidad. Lamentó que aún no exista una mayoría parlamentaria clara en España y consideró que el Brexit ha sido “como si una charla de bar, en la que se alza la voz y se exagera, se plasmara en una decisión política”. Y añadió: “Convocar un referéndum fue una decisión muy arriesgada. Ese instrumento se ha convertido en un bazoka”.
“Despedir debería ser el último recurso; debemos entrar en la lógica de que el trabajo es sagrado”