El Barça gasta el doble en los juzgados que en fichajes
El Barça lleva gastado en sanciones el doble que en incorporaciones
La recompra obligada de los terrenos de Can Rigalt ha caído en el Barcelona como un jarro de agua fría. El laude arbitral condena al club a deshacer una operación de venta de 10.000 metros cuadrados en l’Hospitalet que se hizo en junio de 2005 y a reembolsar 47 millones a la inmobiliaria MAR. Esos 47 millones son el precio de un gran jugador en el mercado. Hasta el punto de que sólo traer a Neymar, Luis Suárez e Ibrahimovic ha costado más al Barcelona en toda su historia que el pago que ahora debe afrontar. De hecho, este verano el Barça lleva pagado más dinero en juicios, multas y sanciones que en incorporaciones para reforzar el equipo. Si por Samuel Umtiti y Denis Suárez se han pagado 28,2 millones, la entidad, entre Can Rigalt, el acuerdo por el caso Neymar y la petición de multa de la UE por ayudas públicas, puede llegar a abonar 57,5 millones, el doble exacto de lo invertido hasta ahora en el Barça 2016-17.
En la secretaría técnica se trabaja con realizar un par de fichajes más. Se busca un delantero para dar descanso al tridente y se está atento al mercado por si hay un lateral derecho o otro medio que se pongan a tiro. El presupuesto inicial eran 60 millones más las ventas. Sin embargo, el nuevo revés judicial es un duro varapalo para las arcas del club. Mientras la entidad aún no tiene patrocinador para la camiseta, aunque se negocia con Qatar y otras dos compañías.
Y es que ha sido un mes horribilis para los servicios jurídicos blaugrana, que no han parado de recibir malas noticias desde que el 3 de junio la UEFA multaba al club con 150.000 euros por los expedientes acumulados por la exhibición de estelades, considerada “bandera inapropiada” en la Champions.
Una semana después los abogados del club llegaban a un pacto con Fiscalía y la Abogacía del Estado para cerrar definitivamente el culebrón del fichaje de Neymar. Después de repetir durante años que lo había hecho todo bien, el Barça ha aceptado una infracción fiscal en los ejercicios de 2011 y 2013 y pagará 5,5 millones. “Ante la posibilidad de ir a juicio y tener que pagar 22 millones, tomamos la oportunidad del pacto”, concedió Bartomeu.
La UE también propone un castigo al Barça de un máximo de 5 millones por excepciones fiscales al no ser sociedad anónima deportiva. Es Hacienda la que debe decidir el montante final del castigo. Pero el club alega que siempre ha estado acorde a la legalidad vigente en España y que desde el 1 de enero de 2016 tributa “igual que las SAD”.
Por último, el lunes llegó el laude de Can Rigalt, terrenos comprados en 1997 por Josep Lluís Nuñez, vendidos en 2005 por Joan Laporta y que ahora Josep Maria Bartomeu deberá recomprar, que sorprendió al entorno por la magnitud del pago. Y porque no se puede recurrir. “Se puede impugnar para que quede nulo”, dijo la vicepresidenta económica, Susana Monje, que en Ràdio Barcelona y RAC 1 describió el contrato de hace 11 años como “muy mal hecho porque no se especifica la fecha de entrega de los terrenos y las condiciones son extrañas”.
Laporta se defendió con un comunicado en el que aseguraba que durante su mandato, que acabó el 30 de junio de 2010, nunca tuvo conocimiento de ese arbitraje. “Exijo la publicación inmediata del laude para que todos los socios podamos saber cómo se ha llegado a esta si- tuación. Durante mi gestión, la venta fue una operación muy rentable para los intereses del Barcelona”, pidió transparencia a la junta.
Lo cierto es que en la memoria económica de la temporada 201415 sí se explicaba el estado del caso. Allí se detalla que en noviembre de 2014 la inmobiliaria MAR instaba a una demanda arbitral solicitando que se cumpliese el contrato o la resolución del mismo. El Barça calculaba que el laude se emitiría en enero de 2016 y la Comisión Gestora, que cerró el ejercicio por las elecciones, y los asesores legales vaticinaba que la demanda arbitral no debería prosperar. “La probabilidad de que se condene al club a la restitución del precio de la compraventa es muy baja (no superior al 25%), de manera que no se derivarán ni minusvalías ni pérdidas financieras”, se lee en el escrito presentado a los compromisarios. Pero se perdió y el Barça debe pagar 47 millones. El fichaje más caro.
47 MILLONES POR CANRIGALT En la memoria económica de 2014-15 se cifraba en un 25% las probabilidades de perder la demanda
CRUCE DE DECLARACIONES Laporta niega que supiese nada del arbitraje y Monje dice que el contrato estaba “muy mal hecho”