Promeses de l’est
Con Una historia de violencia ,en la que dirigió por primera vez a Viggo Mortensen, David Cronenberg, conocido por sus aportaciones −algunas de ellas geniales− al cine fantástico y de terror, dio un giro a su carrera que se confirmó con este nuevo trabajo con el actor. Una historia compleja, protagonizada por el chófer de un capo de la mafia rusa en Londres; el hijo de este, un homosexual reprimido que está secretamente enamorado de él, y una enfermera que vendrá a socavar los cimientos de la existencia de todos esos personajes que viven al margen de la ley. La interpretación de Mortensen, que fue nominado al Oscar por su trabajo, sostiene con su difícil hieratismo una historia que puede resultar excesiva en algunos momentos, con escenas extremadamente violentas, pero a la que la dirección de Cronenberg consigue mantener alejada de la inverosimilitud. El director rodó de nuevo con Mortensen Un método peligroso, en la que el actor encarnó a Sigmund Freud.