Ciutat Vella adelanta una hora el cierre de las terrazas
El distrito planea que el próximo verano los veladores de Joan de Borbó, la plaza Reial y la Rambla cierren como los del resto de la ciudad
La guerra de las terrazas se recrudece. Ciutat Vella pretende que las terrazas del paseo Joan de Borbó, la plaza Reial y la Rambla cierren este verano una hora antes, que lo hagan a la una de madrugada durante las jornadas laborales y a las dos las noches vísperas de festivo. Fuentes municipales confirmaron ayer que ya se firmaron los decretos que lo harán posible, que se publicarán y harán efectivos en breve. De todas formas esta medida no es más que la antesala de una restricción aún mayor. El objetivo del distrito que dirige la concejal Gala Pin es acabar con la vieja singularidad de estos rincones de la ciudad, que todos sus veladores cierren el próximo verano a la misma hora que el resto de terrazas de Barcelona. Entonces lo harían a las doce las noches de entre semana y a la una a más a tardar el resto. Pin pretende de este modo propiciar diferentes usos del espacio público, así como garantizar el descanso de los vecinos. Las recientes limitaciones que aplicó a los espacios abiertos que dan a la playa de las discotecas del paseo Marítim fueron un primer paso.
Además, y en esta misma línea, el distrito está acelerando los procesos participativos que han de concluir en la definición de una veintena de distribuciones previas y ordenaciones singulares. Hablamos del entorno de la iglesia de Santa Maria del Mar, de las proximidades del Macba, de la calle Xuclà... Algunas de estas regulaciones, a pesar de que aún están en el aire, ya perfilan importantes reducciones de su número de mesas y sillas. No son pocos los hosteleros establecidos en algunos de estos lugares quienes, luego de unos primeros contactos con la administración local, explican que las restricciones que les plantean les parecen exageradas. Lo explican desde el anonimato, agregan estos pequeños empresarios, porque no quieren enrarecer aún más sus relaciones con el Ayuntamiento. “Si tanto les preocupan las molestias a los vecinos deberían esforzarse más en combatir la venta ambulante de latas de cerveza”, coinciden los restauradores. La tregua entre hosteleros y Ayuntamiento que pareció instaurarse con la entrada del PSC en el gobierno municipal ahora parece diluirse a toda velocidad. En estos momentos la tensión se está redoblando, y la desconexión es manifiesta. Los planes del distrito de Ciutat Vella contrastan mucho con las declaraciones de intenciones del nuevo teniente de alcalde Jaume Collboni. Los concejales socialistas, desde que asumieron responsabilidades de gobierno, tratan de restablecer las maltrechas relaciones entre los
Las medidas del distrito contrastan con el discurso conciliador del socialista Collboni
El Gremi de Restauració pide a la alcaldesa Colau que interceda
hosteleros y el Ayuntamiento, insisten en subrayar que muchos aspectos de la nueva ordenanza de terrazas han de revisarse, que la nueva regulación ha de aplicarse desde el sentido común, que pueden armonizarse el uso vecinal del espacio público y la actividad económica. Incluso la propia alcaldesa Ada Colau brindó al sec-
La concejal Pin pretende reducir las molestias que ocasiona el ocio nocturno
tor algún guiño conciliador. Representantes del Gremi de Restauración de Barcelona y de la asociación de los restauradores del distrito de Ciutat Vella mantuvieron ayer una reunión con la concejal Pin, una reunión especialmente tensa. “La verdad es que no entendemos lo que está pasando –detalló Roger Pallarols, director del Gremi–. El teniente de alcalde Collboni y también la alcaldesa Colau anunciaron que después de un año abríamos una nueva etapa, que entre todos trataríamos de encontrar una solución de consenso, pero la realidad es que todo ello se contradice con las decisiones que se están tomando y las medidas que se están aplicando desde algunos distritos, sobre todo desde el de Ciutat Vella. Allí se está provocando un gran temor y malestar entre los hosteleros. No entendemos por qué tienen ahora tantas prisas en acelerar la tramitación de las distribuciones previas. Vamos a pedir a Colau y Collboni que intervengan. Es que Ciutat Vella ni siquiera convoca al Gremi a las reuniones que están celebrando sobre estas distribuciones previas, nos dicen que si queremos ir, que nos fijemos en los carteles que ponen por la calle. No nos parece que este sea precisamente un modo de fomentar la participación. Queremos hablar de ello con la Síndica de Greuges”.
Fuentes municipales respondieron ayer que el objetivo del distrito, de todas sus medidas, es garantizar el descanso de los vecinos y reducir las molestias que ocasiona el ocio nocturno. “Nuestra voluntad es que en Ciutat Vella todo el mundo cumpla con los mismos horarios a fin de poder garantizar la igualdad de todos los restauradores del distrito”.
Las fuentes añaden que el distrito está trabajando en la elaboración de más de 80 distribuciones previas “con el objetivo de repensar el espacio público para que se puedan mezclar los usos y asegurar su equilibrio”. El Ayuntamiento también destaca la importancia de poner fin a los incumplimientos de las normativa, algunos de ellos reiterados.