Los Juegos se visten de largo
La delegación española va de Joma; Italia, de Armani, y el Reino Unido, de Stella McCartney
Polo Ralph Lauren firma los uniformes olímpicos de la delegación estadounidense. Lacoste es el suministrador de los del equipo de Francia; los deportistas italianos volverán a contar con los diseños de Giorgio Armani; Dsquared2 viste a los canadienses, y diseños de Stella McCartney, a los representantes del Reino Unido. Y para evitar que se repita la polémica suscitada por los uniformes de la marca rusa Bosco hace cuatro años en Londres y tras dos ediciones sin ser confeccionados por una empresa nacional, la selección española vestirá, en los Juegos Olímpicos que comienzan el próximo viernes 5 de agosto, los diseños de Joma Sport. Cincuenta años de experiencia y la convicción de estar a la altura han permitido a la empresa española asumir este reto no sólo en la cita de Río de Janeiro, sino también para la siguiente edición de los Juegos, en Tokio 2020.
“Cada uno de los 300 atletas españoles recibirá treinta prendas diferentes en las que hay diseño pero sobre todo calidad, la innovación y sentido práctico”, avanzó Marina López, la directora de marketing, antes de que fueran presentados oficialmente los modelos a principios de junio. Y, en efecto, los uniformes de Joma (la firma fundada por Fructuoso López en 1966
Cuba ha elegido al famoso diseñador francés Christian Louboutin para vestir a sus atletas
en su propio pueblo de 2.000 habitantes, Portillo de Toledo, han conseguido ser prácticos o en todo caso adaptarse a las circunstancias en que van a transcurrir estos Juegos de Río. Para el desfile inaugural, todos, ellos y ellas, van a vestir pantalones largos, tipo pitillo, para protegerse del mosquito Aedes (por el zika, claro). Y también manga larga bajo las chaquetas en combinaciones de rojo y azul, mientras que el gualda será para la ropa de entrenamiento y paseo.
Pero Joma, cuya exportación supone el 60% de su facturación, no vestirá sólo a los 300 españoles, sino que serán un total de 2.000 atletas los que lucirán la ropa deportiva de la marca manchega. Porque, además de la española, las selecciones de Eslovenia, Bielorrusia, México, Letonia, Lituania y Moldavia confían en la experiencia de Joma en el sector.
Distinto es el caso de Cuba, que no ha escogido a un diseñador propio, sino que ha confiado en la fama de Christian Louboutin. El famoso diseñador francés, fascinado por Cuba, se asoció con la línea Sporty Henri de su amigo el exjugador de balonmano francés Henri Tai, para crear “looks elegantes de cabeza a pies, incluido el calzado de la delegación de más de cien atletas cubanos para la ceremonia de clausura y otras ocasiones formales”. Él mismo definió su propuesta como “retro y audaz”. Mucho más elegante que la camiseta a rayas (las de la bandera cubana) con que se fotografiaron recientemente los atletas del país y que causó todo tipo de reacciones satíricas en la red.
Quien también tuvo problemas con su uniforme en los últimos Juegos pero intenta solventarlos ahora en Río de Janeiro es la delegación de Estados Unidos. Los atletas estadounidenses volverán a vestir de Polo Ralph Lauren la noche que cerrará los 16 días de competición con una propuesta basada en tres camisas, de color blanco, azul o rojo, con las siglas USA en la espalda, y el logotipo de la marca, el caballo, en la parte delantera, que combinarán con una camiseta interior de rayas horizontales azules y blancas. Pero la firma de moda se ha encargado de dejar muy claro que esta vez la ropa está fabricada en Estados Unidos y no en China como sucedió en el 2012, lo que desató una enorme polémica.