El desequilibrio hasta junio baja al 1,9% del PIB
El déficit del Estado central en el primer semestre alcanzó los 21.343 millones de euros, un 1,4% menos que en el primer semestre del año pasado, según los datos publicados ayer por el ministerio de Hacienda, de forma que se situó en el 1,9% del PIB. La reducción se produce pese a un descenso de los ingresos, de 3.226 millones, y aunque los ingresos fiscales se han mantenido estables (en 72.856 millones de euros), y ha habido un aumento de los ingresos de capital como los dividendos del Banco de España. Los gastos han seguido creciendo, destacando el aumento del 4,8% de las pensiones de las clases pasivas (funcionarios y militares jubilados, principalmente); del 2,4% en la formación bruta de capital, en la que el ministerio destaca la mayor inversión en las fuerzas armadas; de un 2,3% en los sueldos de los funcionarios, y del 1,4% en las transferencias a las comunidades autónomas. Descienden en cambio en 3.093 millones los gastos en cobertura del desempleo; las transferencias entre administraciones públicas; la aportación al presupuesto de la UE porque se han ejecutado menos obras en los programas cofinanciados por la CE, y las transferencias de capital a organismos públicos.
Hacienda publicó también el déficit consolidado de las administraciones públicas hasta mayo: 26.007 millones, un 12,8% más que el año pasado, equivalente al 2,32% del PIB. El déficit crece por un aumento del 11,6% del desequilibrio de la administración central (que fue de 23.754 millones, el 2,12% del PIB), y pese a que las autonomías han reducido su déficit un 24,8% en el último año, hasta los 4.031 millones (el 0,36% del PIB). El uso de 1.778 millones del fondo de reserva de la Seguridad Social hasta mayo permitió reducir la necesidad de financiación de las administraciones públicas. Catalunya ha reducido su déficit un 32% desde mayo del 2015, hasta situarlo en 880 millones, equivalente al 0,41% de su PIB. Las comunidades más deficitarias, respecto a su PIB, son Extremadura (1,1%) y Navarra (0,95%), mientras Euskadi, La Rioja, Canarias y Asturias tuvieron superávit fiscal.