Aros de oro
Cuatro de los diez deportistas mejor pagados de los Juegos son de la selección de EE.UU.
Cuatro de los diez deportistas que más cobran de los que participan en los Juegos Olímpicos pertenecen a la selección de baloncesto de Estados Unidos, empezando por Kevin Durant, una de las figuras de la NBA, que se embolsa 56,2 millones, 23 más que el icono olímpico, el atleta Usain Bolt.
La NBA no olvida nunca que es una marca. Lo demuestra toda la temporada con sus franquicias y lo refrenda cuando la selección estadounidense, aunque no dependa de la liga norteamericana, toma el relevo. Por eso estudian muy bien a nivel comercial cada paso que dan cuando asaltan la escena internacional en unos Juegos Olímpicos. Por eso impresiona verlos llegar, torres humanas, a los doce jugadores a una sala de prensa. Todos allá sentaditos y dispuestos a admitir preguntas. Es parte de su trabajo. Lo tienen asumido y les reporta grandes dividendos. No en vano, cuatro de los diez deportistas que más cobran de los que están en los Juegos pertenecen al conjunto estadounidense de baloncesto. Empezando por Kevin Durant, que se embolsa 56,2 millones, 23 más que el icono olímpico Usain Bolt. Durant no tiene el carisma envolvente de Kobe Bryant, capaz de hablar en italiano, español e inglés y de lanzar el elogio justo en el momento más oportuno. Tampoco tiene la plasticidad de Stephen Curry, que magnetiza con su mirada. Ni la sonrisa mascachicle de LeBron James. Pero es el hombre del verano en la NBA por su traspaso a los Golden State Warriors, donde buscará lo que le falta: el anillo. Porque el oro olímpico ya lo tiene y también el título de campeón mundial. En ambatido bas citas demostró que su baloncesto elegante y diésel se adapta perfectamente a las especificidades del juego internacional, con un estilo menos libre, defensas a veces en zona y menos tiempo de partido. Casi nunca le abandona la seriedad y su voz impresiona hasta cuando habla de China, ante la que hoy debutan (medianoche en España). “Aunque no lo parezca nos han dado trabajo”, sintetiza. Un comentario harto generoso teniendo en cuenta que en la preparación han a los chinos por 49 y 50 puntos. Da igual el rival. Lo importante son ellos y su estreno será uno de los puntos fuertes del primer día de competición. Más adelante esperan encontrarse con España. “Yo siempre fui fan de Pau Gasol”, compila Durant.
Mucho se ha hablado de las ausencias del equipo porque no están, entre otros, ni Curry ni James, actores principales de la última temporada, pero el conjunto estadounidense está repleto de jugadores que podrían ser figuras en cualquier equipo. Cerca de Durant, en el desembarco americano ante la prensa, se encuentra Kyrie Irving, un diablo con el balón, fundamental en la final de la NBA y mano derecha de LeBron en Cleveland. Ya sabe lo que es triunfar con EE.UU., pues fue declarado el mejor jugador del Mundial de España en el 2014. En aquel equipo campeón también estaba Klay Thompson, socio habitual de Curry en los Warriors y un auténtico perdonavidas cuando te contesta a una pregunta. En cambio quien es nuevo en estas lides es su compañero en Golden State Draymond Green, el personaje del equipo que hace poco se vio envuelto en una polémica por fotografiarse su pene. Todavía hay otro jugador con sabor a la bahía de San Francisco. Se trata de Harrison Barnes, que ha dado con sus huesos en Dallas por la llegada de Durant a Golden State.
La veteranía la pondrá Carmelo Anthony, que vive una pesadilla deportiva en los Knicks pero que acostumbra a acudir de buen grado a la llamada de la selección. Serán sus cuartos Juegos Olímpicos, algo que ningún baloncestista estadounidense puede decir. “He estado en este equipo desde el 2004 y sé lo que se siente cuando el resto te recorta distancias. Sé lo que es estar en el suelo”, dice Anthony, que conoció la derrota con Estados Unidos en los Juegos de Atenas. Una rara avis porque en la historia olímpica del conjunto los números son rotundos: 130 triunfos y 5 debacles.
Para llevar al equipo a buen puerto y no sólo porque en Río residen en un crucero de lujo sigue como técnico Mike Krzyzewski. Ya saben, ese entrenador con formación militar que siempre lleva bermudas y un silbato en los entrenamientos y que podría aparecer en cualquier serie americana haciendo el papel de técnico de instituto o universidad. “No he seguido aún a España porque no está en nuestro grupo pero yo admiro a Pau Gasol, es el hombre de Estado hablando de baloncesto en España”, ensalza Coach K. Dentro de su profesionalidad extrema, el seleccionador es lo que queda de aroma amateur en el equipo, aquel aroma de cuando los que competían no eran todavía de la NBA.
EL DATO Kevin Durant, el hombre del verano en la liga americana, ingresa 23 millones más que Bolt
PENSANDO EN EL MERCADO Cada paso del equipo está medido y su puesta en escena impresiona por su sentido del negocio