Esoterismo y misterio en torno a unos huesos humanos hallados en Calpe
La aparición de varias sábanas anudadas con huesos humanos y objetos supuestamente usados en un ritual en aguas del Peñón de Ifac han roto la tranquilidad de la plácida y turística Calpe (Alicante), cuyos vecinos viven con estupor y desconcierto la sucesión de estos macabros hallazgos. Desde el pasado fin de semana han aparecido a una profundidad de entre 4 y 5 metros en la bahía calpina esas tres sábanas. Al parecer los restos óseos humanos pertenecen a un individuo enterrado hace entre 30 y 40 años. También se han hallado objetos utilizados en algún tipo de rito.
Entre las piezas, una estatuilla de bronce de la que se cree que pueda tener algún significado satánico, así como un cuchillo, plumas de aves, un cuenco, ramas de arbustos, el esqueleto de un pájaro y una muñeca de juguete. También hay fotos con nombre y apellidos de una docena de personas vivas de varias provincias españolas –cuyas identidades no han trascendido salvo que hay al menos una en Extremadura– así como papeles de requerimientos de la Agencia Tributaria.
En cuanto a los restos óseos humanos, debió haber sido enterrado hace varias décadas por la pigmentación terrosa que presentan, aunque se desconoce la identidad y procedencia ya que no ha habido exhumaciones en cementerios cercanos.
La tercera y última sábana encontrada hasta el momento, recuperada ayer mismo a 4,5 metros de profundidad con más huesos y objetos, está decorada con símbolos esotéricos, y aumenta el asombro de los vecinos en un momento aún de gran afluencia de visitantes. Los calpinos no vinculan el hallazgo de los restos rituales a supuestos poderes telúricos o mágicos del conocido Peñón de Ifac, el emblema de la ciudad.
El presidente de la Asociación Española de Santería Afrocubana (precisamente con sede en Alicante), Paulino Hernández, ha desmentido rotundamente que lo encontrado esté relacionado con su actividad porque “en ningún rito santero se pueden usar huesos humanos”.
Los descubrimientos tuvieron lugar después de que bañistas y practicantes de buceo en superficie o snorkeling confundieran al principio las sábanas con despojos de barcos de pesca o desperdicios arrojados por alguna embarcación de recreo. Se cree que estos paquetes pudieron ser lanzados a comienzos de la pasada semana. Los buzos de la Guardia Civil se han encargado de las extracciones y siguen aún peinando el fondo marino por si hay más sábanas.