Manuel Valls defiende la renta básica general
Por segunda vez en una semana, el primer ministro, Manuel Valls, posible candidato al Elíseo si François Hollande decidiera no presentarse, ha defendido la idea de introducir en Francia una renta básica universal. “Se trata de un subsidio, único y abierto a todos a partir de los 18 años que reemplace a la decena de subsidios de mínimo vital existentes”, explica Valls en una tribuna publicada en Facebook. El 15 de septiembre Valls ya lanzó esa idea como posible bandera socialista para la campaña de las presidenciales de abril-mayo del 2017.
Contexto de la propuesta son las arremetidas contra el estado asistencial lanzadas por algunos aspirantes de la derecha tendentes a culpabilizar al desempleado. Nicolas Sarkozy, por ejemplo, propuso en verano restablecer un servicio militar obligatorio para jóvenes sin empleo, “donde se les enseñaría a levantarse pronto”.
“No acepto que se señale con el dedo a los más débiles”, dice Valls.
La renta básica universal es una idea fuerza de progreso para resolver el hecho de la creciente escasez de trabajo y la miseria que resulta. Aunque Valls no entra en detalles, su financiación se deduce de una mayor justicia fiscal (los más ricos pagan más), así como de la eliminación de los demás subsidios y su burocracia. Un estudio de la Fundación Jean Jaurès estima que una renta básica de 225 euros hasta los 15 años, seguida de 375 hasta los 18 y de 750 entre los 18 y los 65, que alcanzaría 1.125 después, le costaría a Francia el 26% de su PIB.