El conjunto blanquiazul cae contra el Celta (0-2)
Los blanquiazules caen ante el Celta en el añadido tras regalar el primer tiempo y perder a Baptistão
De la mayor ilusión a la frustración más absoluta. Así vivió anoche el españolismo la visita del Celta a Cornellà y así viene viviendo un inicio de temporada tan esperanzador como desastroso. El Espanyol volvió a encajar –aún no ha dejado su puerta a cero– y cayó en el tiempo añadido después de regalar los primeros 45 minutos. Para colmo, perdió por lesión a Léo Baptistão, una de sus mejores piezas.
Tenía preparada anoche Sánchez Flores una sorpresa para la grada, que no fue otra que un cambio de sistema, un 4-3-3 que no había ensayado en los entrenamientos –a no ser que lo haya hecho en los que ha realizado a puerta cerrada– y que sólo había puesto en práctica en los últimos minutos que su equipo disputó en El Sadar. Debió gustarle lo que vio allí, ya que salió de inicio con un dibujo en el que Javi Fuego ejerció de mediocentro, Diop y Marc Roca de interiores y Baptistão estuvo flanqueado arriba por Reyes y Gerard, quienes en lugar de jugar como extremos lo hicieron también por el centro.
De entrada, el Espanyol ganó ver- ticalidad y combinaciones gracias a esa acumulación de jugadores por la misma zona, pero regaló las bandas al Celta para que Pione Sisto y Bongonda, que se fueron alternando, corriesen a placer y siempre estuviesen en las coberturas, de manera que a los visitantes les bastaba abrir el juego para mantener el control y llegar con el balón en los pies al área de Diego López.
La inesperada guerra táctica acabó en tablas en un primer tiempo en el que el Espanyol, sin tener el dominio del balón, tuvo las ocasiones más claras gracias a las combinaciones que Baptistão encontró en Reyes, que jugó sus mejores minutos con la camiseta españolista en una posición muy propicia para él. El hispano-brasileño tuvo el gol en el 26, cuando un balón peinado por Diop le dejó solo ante Sergio, pero disparó al muñeco. Y en el 30, cuando Reyes le metió un balón en el área que remató a la media vuelta y que esta vez se encontró con la mano del meta visitante.
También tuvo el Celta sus ocasiones en ese primer período, en especial a balón parado, donde Wass y Aspas se estrellaron contra las barreras blanquiazules. Diego López también tuvo trabajo en esos minutos para detener algún disparo del ariete visitante.
Tras la reanudación, el míster españolista no dudó en rectificar y volver a su esquema habitual, sacrificando para ello a un Marc Roca desdibujado, que había sufrido mucho en la contención y que se había ganado una amarilla. En su lugar apareció Hernán para que todo volviese a la normalidad. Es decir, para
EXPERIMENTO FALLIDO Salió Sánchez Flores con un 4-3-3 que no había ensayado y que deshizo en el segundo tiempo
que el Espanyol volviese a ordenarse en dos líneas de cuatro afanadas en la contención y en el robo para contraatacar por velocidad. Aunque entonces apareció el infortunio para que Baptistão primero y Reyes después se tuviesen que retirar lesionados. Caicedo volvía a tener una nueva oportunidad para reivindicarse y Jurado volvía a contar con minutos para demostrar, al técnico y al españolismo, su capacidad.
A partir de ahí el Espanyol tuvo un mayor control de juego, se vino arriba y firmó sus mejores minutos para fervor de la grada. Pero si Jurado sí supo aprovechar esos minutos para demostrar que puede ser una pieza importante de este equipo y mucho más que un relevo puntual de Piatti, Caicedo no consiguió hacer sombra a Baptistão como referente en punta y apenas si remató de cabeza desviado un centro del propio Jurado. Gerard fue quien más buscó el gol y dispuso de buenas ocasiones.
Condenado a un empate que incluso habría satisfecho a la parroquia local por la entrega que ponía su equipo, el duelo acabó de la forma más cruel para el españolismo, con dos goles del Celta ya en el tiempo añadido. El primero por una descoordinación entre Javi López y David López de la que se supo aprovechar un Rossi que aún no ha sido titular esta campaña con su equipo y el segundo de Pione Sisto, que culminaba con un disparo cruzado una contra cuando el Espanyol estaba buscando el empate a la desesperada. El Celta no ganada a los blanquiazules a domicilio desde que jugaban en Montjuïc.
EL INFORTUNIO Baptistão y Reyes tuvieron que retirarse lesionados y Caicedo no aprovechó una nueva oportunidad