Libérrima complicidad
Los encuentros artísticos entre dos personajes aparentemente tan diferentes como Albert Pla y Diego Cortés despertaron la mayor de las expectaciones cuando comenzaron a ser una realidad hace ya un buen puñado de años. El multifacetismo de Pla ya es suficientemente conocido –provocador, músico, bufón, cantante, actor, escritor...– mientras que a Cortés le avala un currículo como guitarrista abrasador. Un encuentro que tiene lugar intermitentemente, en el que el artista catalán da rienda a su vis más libérrima como escenificador de algunas de sus emblemáticas composiciones.