Seis series nacidas en ‘Tube d’assaig’ verán la luz esta temporada
BTV financiará con 50.000 euros la continuidad de una de las ficciones
La segunda temporada de Tube d’assaig arranca mañana, domingo, a las 21.30 horas en BTV después de “haber superado con creces las expectativas suscitadas”, según explica el director de la cadena pública, Sergi Vicente, quien se muestra satisfecho de los resultados obtenidos con esta iniciativa de la Universitat Pompeu Fabra y Barcelona Televisió para impulsar proyectos audiovisuales de nuevos talentos mediante una campaña de recogida de dinero vía Verkami que busca hacer de puente entre el mundo académico y el mundo profesional.
Este curso se podrán ver las primeras temporadas de seis ficciones que el año pasado emitieron un piloto y consiguieron financiación con el apoyo de la audiencia de BTV. Se trata de Air, 5 minuts tard, Otro cuento más, The last call, No, we can’t y Mediocrity. El primer piloto que se estrenó, El muerto vivo, pagó el peaje “de ser el primero y no consiguió la financiación por muy poco, pero hubo justicia poética y ganó un Ondas”, añade Vicente. En paralelo al estreno de estas producciones, se seguirán emitiendo pilotos (mañana se estrena Viral y más adelante Follo ergo sum), que buscarán entrar en el circuito del programa para obtener continuidad. Una vez se emita la primera temporada, los creadores pueden optar a una subasta para conseguir una segunda entrega, ya más profesional y con más recursos, en que entren empresas del sector. “Para predicar con el ejemplo, BTV pondrá un mínimo de 50.000 euros y de esta manera garantiza que, como mínimo, una serie surgida de Tube d’assaig acabará el recorrido entero”, apunta Vicente, que recuerda con orgullo que el programa fue seleccionado para el festival internacional Input de televisión pública.
El otro impulsor del proyecto, Jordi Balló, profesor del Departamento de Comunicación de la UPF, se muestra satisfecho de que se haya confirmado que la voluntad del proyecto “era que fuera participativo” como demuestra “que se hayan sumado más universidades al programa” y que con este espacio se haya encontrado “una salida al talento emergente en el mundo de la serielidad”.